Mikaela Mayer pudo contener un ataque tardío de su rival Sandy Ryan para ganar por decisión unánime y retener el título de peso welter de la OMB femenino el sábado por la noche.
LAS VEGAS -- Gracias a un implacable ataque inicial, liderado por un potente jab, Mikaela Mayer logró contener una embestida tardía de su rival Sandy Ryan para ganar por decisión unánime y retener el título wélter femenino de la OMB el sábado por la noche.
Fue una revancha de su enfrentamiento de septiembre, cuando Mayer ganó por una controvertida decisión mayoritaria y le arrebató el título a Ryan. La revancha fue posiblemente más entretenida, con una victoria más contundente para Mayer. Sin embargo, tuvo que defenderse de una remontada tardía de Ryan para conservar su campeonato.
Dos jueces calificaron la pelea con 97-92 y un tercero con 98-92. Pero las puntuaciones no reflejaron la intensidad del combate.
"Quería darle una paliza y lo hice", dijo Mayer, quien mejoró su marca a 21-2.
La atleta olímpica de 2016 comenzó con fuerza, trabajando detrás del jab y presionando la acción. A diferencia de su primer encuentro, Ryan (7-3-1) se mostró más serena y paciente, buscando oportunidades para contraatacar con la derecha. Pero la persistencia de Mayer obligó a Ryan a reaccionar desde el principio y controló los asaltos intermedios. Para cuando Ryan decidió iniciar el intercambio, ya era demasiado tarde. Sin embargo, se desató una batalla que complació al público entre rivales acalorados que solo querían terminar la pelea por nocaut.
La rivalidad entre Mayer y Ryan se había vuelto más virulenta durante el último año. Antes de su primer encuentro, se enfrascaron en una acalorada disputa verbal que aumentó la tensión cuando Ryan fue víctima de un ataque con pintura roja por parte de un desconocido camino al Madison Square Garden para su pelea con Mayer. La británica Ryan culpó a Mayer del ataque, en el que la estadounidense negó rotundamente estar involucrada.
La polémica decisión avivó aún más la disputa. Ambos también discutieron sobre Kay Koroma, antiguo entrenador de Mayer, quien entrenó a Ryan para su primera pelea y estuvo en la esquina del excampeón en la revancha.
Pero con un final más definitivo, la rivalidad ha llegado a su fin y Mayer buscará desafiar a Lauren Price, quien ostenta los otros tres títulos mundiales principales de peso wélter, para determinar al campeón indiscutible.