Ocho jugadores diferentes tuvieron la punta del torneo en algún momento durante la vuelta final del PGA Championship, que se jugó en la cancha de Harding Park en San Francisco, California. Ninguno de ellos terminó levantando el Wannamaker Trophy. Ocho, y ninguno de ellos fue Brooks Koepka…
El noveno, el estadounidense Collin Morikawa, supo ser paciente en el apretado pelotón que peleaba el torneo y, cuando llegó su hora, clavó con precisión un estilete afilado y dejo a todos con las manos vacías y sin esperanzas. Fue el perfecto trabajo de un cirujano, rápido y sin dolor. Todos lo aceptaron, fue el justo campeón. Inapelable.
Morikawa, de solo 23 años, y haciendo apenas su segunda aparición en un Major, hizo 64 golpes (-6) en la vuelta final y terminó ganando por dos golpes el PGA Championship sobre los más destacados jugadores del golf mundial. Su águila en el hoyo 16, un par 4 corto de 292 yardas, fue una obra de arte, no solo por la calidad de los dos golpes, sino también por la oportunidad y la estrategia.
Morikawa, con poco más de una año en el PGA Tour, ya tiene tres victorias. A pesar de su corto recorrido como profesional es elogiado por la solidez de su swing y por la forma en que golpea la pelota. “Esto es algo que siempre soñé. San Francisaco es una ciudad que está muy cerca de mis afectos y ganar aquí es increíble”, decía Morikawa en la ceremonia de entrega del premio.
Su corta carrera profesional puede resumirse así: En junio de 2019 hizo su debut como profesional en el RBC Canadian Open. El 7 julio de 2019 quedó segundo en el 3M Open. Dos semanas más tarde ganó su primer torneo en el PGA Tour, el Barracuda Open. El 14 de junio de 2020, en el primer torneo luego de la suspensión por el Covid, empató el primer puesto en el Charles Schwab Challenge y perdió en el desempate con Daniel Berger. El 26 de junio de 2020 falló su primer corte, luego de pasar 22 consecutivos, un record solo superado por Tiger Woods. El 22 de julio de 2020, Morikawa derrotó en playoff a Justin Thomas para ganar su segundo título en el PGA Tour, nada menos que en el Memorial Tournament. En esa oportunidad Morikawa, que estaba a tres golpes de la punta faltando solo tres hoyos, arremetió para entrar en el playoff del que saldría victorioso.
Con este triunfo en el PGA Championship es el cuarto jugador en la historia moderna en ganarlo con menos de 24 años, igualando a Tiger Woods, a Jack Nicklaus y a Rory McIlroy. Como pueden ver, este triunfo que parece una sorpresa, era de alguna manera esperable.
Pero casi tan sorpresiva como es la victoria de Morikawa fue la desaparición de Brooks Koepka de lo alto del tablero. Koepka, que pelaba su tercer título consecutivo y empezó la vuelta final a solo dos golpes del puntero, Dustin Johnson, quedó rápidamente relegado al hacer un bogey en el hoyo 2. Koepka dijo el sábado por la noche que su experiencia lo iba a poner en posición, pero que su swing no estaba sólido y su juego en el green, un poco frío. Al terminar el domingo decía: “Es mi primera mala vuelta final en un Major en mucho tiempo. Fue muy decepcionante terminar la ida en +4. Cada vez que fallé el fairway tuve lies muy malos. Para peor, nunca me sentí cómodo en los greens. Pero me quedan dos grandes por delante este año y veré de estar en buena forma para tratar de ganarlos”. Koepka hizo 74 (+4) y quedó en el puesto 29.
Dustin Johnson, uno de los ocho derrotados, rápidamente puso doble dígito bajo par al hacer birdie en el primer hoyo. Pero cuando tuvo que apretar el paso en los segundos nueve, el ganador de 21 torneos del PGA Tour, no pudo mostrar la calidad y la finesa de los tres primeros días. El birdie final en el 18, con el resultado sellado, lo puso empatado en el segundo puesto y con sabor amargo.
El inglés Paul Casey volvió a quedarse corto en este, su Major número 64. Casey jugó un extraordinario golf el domingo, quizá el mejor que se la ha visto en una ronda final de un torneo mayor. Hizo birdies en el 4 y en el 5 para unirse a los líderes. Y cuando hizo bogey en el 13 pudo haber flaqueado, pero se puso los pantalones y respondió al toque con un birdie en el 14. “Jugué un golf extraordinario y no hay nada que hubiera cambiado. Estoy muy contento con como jugué. Tuve una gran actitud y mucha calma. No fue suficiente. La gloriosa manera en la que Collin jugó el 16 solo merece mi admiración” dijo Casey.
Cinco jugadores quedaron a dos golpes detrás de Morikawa con -11. El australiano Jason Day (66) y los estadounidenses Mathew Wolff (65), Bryson DeChambeau (66), Tony Finau (66) y Sottie Scheffler (68).
Tiger Woods terminó en gran forma el torneo con un 67 (-3) que lo puso en el puesto 37. Buena señal del californiano con miras a los Playoffs de FedEx Cup que ya comienzan.
El mexicano Abraham Ancer fue el mejor de los dos latinoamericanos del torneo. Su última vuelta de 69 golpes (-1) le dieron un total de par de cancha y el puesto 43.
El argentino Emiliano Grillo peleó con los fantasmas y con una vuelta final de 73 golpes (+3), terminó en el puesto 66. Cosas buenas y cosas malas para el chaqueño en este torneo. Está enfocado en mejorar su juego sobre el green y si consigue hacerlo los resultados seguramente llegarán.
Pasó el primer Major del año. El vibrante desenlace del PGA Championship deja a los aficionados con ganas de más golf del bueno. Hace tiempo que un torneo grande no tiene una definición tan apretada y con tantos jugadores con chances de ganar. Ahora viene la definición de la FedEx Cup y en septiembre, el segundo Major, el US Open desde Winged Foot en New York.