LIMA (Enviada especial) -- El handball masculino debutó con una victoria 38-25 ante Estados Unidos, en el grupo B de los Panamericanos, y Federico Pizarro celebró por partida doble.
Al jugador de UNLu se lo vio preocupado, chiflando, gesticulando, preguntando algo que no se entendía bien que era. En pleno entretiempo estaba intentando averiguar cómo había terminado el partido de Boca.
Mientras realizaban los movimientos precompetitivos, el Xeneize estaba jugando su llave de Copa Libertadores ante Paranaense. Desde la tribuna le hicieron señas de que todo había salido bien y se tranquilizó.
El partido siguió viento en popa y Argentina se estrenó con una victoria en Lima. Una vez finalizado el encuentro, Fede se enteró del 2-0 a favor del equipo de Alfaro y lanzó su deseo: “Ojalá nos crucemos con River en semifinales”.
“Cuando te gana un equipo con el que tenés pica, lo único que querés es volver a jugar rápido y sacarte la espina”, agregó.
Enseguida apareció Pablo Vainstein y presumió: “Yo soy hincha del ultimo campeón de la Libertadores”. El Colo aprovechó la situación para chicanear a su compañero: “Ayer también se lo vio muy preocupado por ver cómo le iba a River ante Cruzeiro”.
Federico Fernández, otro confeso hincha de River, se sumó a la cargada y gritó a lo lejos: “Qué raro que no fueron para atrás para evitar cruzarnos”.
Entre risas y golpes amistosos, continuaron las cargadas “súperclásicas” camino al vestuario de la Videna y comenzó el tiempo de pensar en el inminente cruce con Chile, este jueves.