Alex De Miñaur (7º) ganó nueve títulos a lo largo de su carrera. Sin embargo, no logró alzar ningún trofeo sobre polvo de ladrillo. Ahora bien, eso no le impide ser un jugador más que competitivo en esa superficie. De hecho, sucede todo lo contrario: en este 2025, alcanzó las semifinales en el Masters 1000 de Monte-Carlo y los cuartos de final en el ATP 500 de Barcelona. En ambos, cayó ante el futuro finalista (Musetti y Alcaraz, respectivamente). En el Madrid Open debutó con un cómodo éxito ante el italiano Lorenzo Sonego (43º) por 6-2 y 6-3 en 1h15m.
"Estoy jugando muy bien, cada vez más consistente. Desde hace dos años, creo que entendí lo que debía hacer para ser competitivo en polvo de ladrillo y lo estoy consiguiendo. La clave fue haber trabajado muy duro en el gimnasio, para fortalecer mi tren inferior y desplazarme mejor, así como para incrementar la potencia de mis golpes. Puse mucho esfuerzo en eso y ahora las sensaciones son cada vez mejores", analizó el australiano, quien entrenó durante mucho tiempo en Alicante, España.
Además, comentó en la conferencia de prensa: "Hace tres años esta parte de la temporada era difícil para mí porque no podía ofrecer mi competitividad habitual. Mi objetivo siempre fue ser sólido en todas las superficies y poder competir a mi máximo nivel todas las semanas del año. Estoy cerca de mi techo en polvo de ladrillo. Ahora mismo me veo preparado para ganarle a cualquiera en esta superficie".
El próximo rival del nacido en Sídney en la capital española será el canadiense Denis Shapovalov (30º), con quien está 4-1 arriba en el historial. Eso sí, nunca se enfrentaron en este tipo de canchas.