El equipo de Morten Olsen se quitó en su antepenúltima prueba antes del Mundial el mal sabor de boca de la derrota y la mala imagen ofrecida en su último partido amistoso ante Irlanda y demostró, con un juego ofensivo y el control total del balón, que está muy por encima del nivel de Israel.

Los israelíes repitieron en Copenhague la paupérrima impresión de su última derrota en Alemania y dejaron bien claro sobre el césped que el despliegue masivo de fuerzas de seguridad con motivo de su visita no se debe precisamente a su habilidad como futbolistas.

Los locales no tardaron mucho en ponerse por delante en el marcador y, a los tres minutos, el veterano capitán Heintze aprovechó un rechace de la defensa israelí a la salida de un saque de esquina para batir a Strauber con una gran volea desde fuera del área.

Si al partido le quedaba alguna emoción después del primer tanto danés, esta desapareció completamente a los trece minutos, cuando Jon Dahl Tomasson regateó a un defensor y al arquero para marcar con la valla vacía.

A partir de entonces, Dinamarca se dedicó a tocar el balón y buscó con insistencia la profundidad de la banda derecha, donde Groenkjaer fue una constante referencia de peligro para la zaga israelí.

Precisamente por el lado derecho llegó el tercer gol danés, cuando un saque de esquina jugado en corto llegó a los pies de Rommedahl que, con un disparo raso y cruzado que rozó en un defensor, colocó el 3-0 a los treinta y seis minutos de juego.

El partido no tuvo historia a partir de entonces. Morten Olsen probó durante la segunda parte a varios jugadores que se disputarán las últimas plazas de su lista para el Mundial, que continuaron manteniendo la posesión del balón y que, si no pudieron ampliar el resultado, fue por su falta de acierto ante la portería rival.

Israel maquilló el resultado en el tiempo añadido con un penal transformado por el ex Atlético Avi Nimni, en el único disparo al arco de su equipo en todo el partido, que dio al arquero danés la oportunidad de salir en las pantallas de televisión por primera vez en todo el choque.

En resumen, una cómoda victoria -aunque corta por el juego mostrado por ambos equipos- y una buena imagen de Dinamarca ante un rival que no estuvo al nivel de un equipo mundialista.

SÍNTESIS DEL PARTIDO

3 - DINAMARCA: Soerensen; Boegelund, Henriksen (Thomas Frandsen, m.65), Laursen, Heintze (Jensen, m.80); Gravesen (Steen Nielsen, m.80), Poulsen (Per Frandsen, m.71), Tomasson (Loevenkrands, m.46); Rommedahl (Michaelsen, m.60), Sand y Groenkjaer (Madsen, m.46).

1 - ISRAEL: Strauber; Bachar, Ben Dayan (Tikva, m.46), Benado, Harazi; Keisi, Badeer (Beyoun, m.46), Ben Ami (Rosen, m.46), Nimni, Abukasis; y Balili (Katan, m.64).

GOLES: 1-0, M.3: Heintze. 2-0, M.13: Tomasson. 3-0, M.36: Rommedahl. 3-1, M.91: Nimni, de penal.

ÁRBITRO: Jack van Hulten (HOL).