Hace un año, Dave Dombrowski identificó las principales necesidades de los Medias Rojas de Boston -- un cerrador, un cuarto jardinero, un abridor No. 1, ayuda para el bullpen - y entonces llenar el equipo con otros elementos al conseguir en cambio a Craig Kimbrel, firmar a los agentes libres Chris Young y David Price, y conseguir en cambio a Carson Smith.
Hecho. Hecho. Hecho. Y Hecho.
Dombrowski lo hizo parecer fácil en su primera temporada baja como presidente de operaciones deportivas de los Medias Rojas. Llevó a cabo su plan tal y como lo planificó, sin desviarse del boceto original, al adquirir su primera selección en cada posición, y lo hizo antes de la Navidad.
Pero en muy raras ocasiones sucede de esa forma. Usualmente los equipos deben adaptarse sobre la marcha a medida que su estrategia para construir su roster se altera por las fuerzas del mercado que sacan a los jugadores del pizarrón con unos términos que exceden lo precvisto. Y al abrirse las reuniones invernales en un suburbio de Washington, D.C., está claro que la segunda temporada baja de Dombrowski al mando de los Medias Rojas no va a ser tan fácil como la primera.
Comencemos con el hecho de que el agente libre de 39 años Carlos Beltrán acordó el sábado un contrato de una temporada y $16 millones con los Astros de Houston. Beltrán encajaba bien en el puesto de bateador designado para sustituir al retirado toletero e ícono de los Medias Rojas David Ortiz. En cambio, Beltrán se une al receptor Brian McCann y al jardinero Josh Reddick en una renovación de temporada baja que prueba que los Astros vienen en serio con sus intenciones de ser contendientes luego de fallar en entrar a la postemporada este año.
Matt Holliday era el potencial Plan B. Pero llegó a un acuerdo el domingo en la noche con los Yankees de Nueva York con un acuerdo según reportado de $13 millones por una temporada. Así que Dombrowski deberá tachar otro nombre de su lista en su búsqueda de un bate del medio de la alineación para reemplazar la producción de Ortiz.
Si Ortiz estuviera a cargo, él le habría dado un contrato de cuatro o cinco años a su amigo Edwin Encarnación y seguiría atendiendo las otras necesidades de los Medias Rojas, principalmente un preparador para la octava entrada.
"Cuando tienes a un tipo como Edwin haciendo lo que él hace, él puede pedir lo que quiera", dijo Ortiz el viernes en su evento caritativo de golf en República Dominicana. "No todo el mundo batea 40 jonrones en las Grandes Ligas y hace lo que él está haciendo. Si vas a reclutar a un tipo como ese, es mejor que traigas buen dinero contigo".
Pero Ortiz todavía no tiene trabajo con los Medias Rojas. (En algún punto, él dijo que le gustaría participar en algún rol, quizás como asesor, parecido a Pedro Martínez.) E incluso el propio Ortiz sabe que los Medias Rojas tienen otras consideraciones financieras, incluyendo la posibilidad de discutir el asegurar a sus estrellas jóvenes Mookie Betts y Xander Bogaerts con extensiones a largo plazo.
Como resultado, Dombrowski aparenta tener poco apetito para firmar otro agente libre en un contrato a largo plazo, a pesar del hecho de que Encarnación ha promediado 39 jonrones y 110 impulsadas en las últimas cinco temporadas y cumplirá 34 años en enero.
Así que, si no es Encarnación, ¿entonces quién?
Beltrán y Holliday no eran las únicas opciones a corto plazo para el puesto de designado. Los Medias Rojas podrían intentar fichar a los agentes libres Mike Napoli o Pedro Álvarez. Napoli, de 35 años, tuvo uno de sus mejores años para los Indios de Cleveland pero quizás no logre conseguir algo más allá de dos años garantizados. Álvarez, bateador zurdo, tiene potencial en el medio de una alineación de los Medias Rojas que se inclina más a la derecha que el Congreso. Además conectó 22 jonrones y tuvo slugging de .504 a tiempo parcial con los Orioles de Baltimore la pasada temporada.
Y entonces está José Bautista, cuyo valor en el mercado cayó luego de una pobre temporada con los Azulejos de Toronto. Pero no hace mucho Bautista, de 36 años, llegó entre los primeros 10 en las votaciones del JMV de la LA en dos temporadas seguidas. Si termina aceptando un acuerdo a corto plazo para recuperar su valor, los Medias Rojas podrían aprovecharse.
"Siendo agente libre, uno tiene que estar abierto a todas las posibilidades", dijo Bautista, invitado en el evento de Ortiz en el fin de semana. "Yo no sé lo que me va a deparar el futuro. Pero sí estoy emocionado por ver como se desarrollarán las cosas".
Los Medias Rojas podrían recurrir al mercado de cambios para conseguir producción del lado izquierdo. Los Mets de Nueva York, en particular, están intentando mover a Jay Bruce o Curtis Granderson, ya que ambos están firmados solo hasta el 2017. Bruce se ganará $13 millones la siguiente temporada, mientras que Granderson recibirá $15 millones.
El jardinero central de los Orioles Adam Jones tuvo otra idea para resolver el problema de los Medias Rojas con su vacante en el puesto de designado.
"¿Qué tal si Boston decide hablar con Ortiz y decirle, 'Papi, aceptarías un año más por $28 millones?'", dijo Jones el viernes.
Bueno, Big Papi, ¿qué crees de eso?
"Creo que ya he sido bastante claro, ¿sabes?", dijo Ortiz. "No se trata del dinero. Es como uno se siente. Yo ya estoy viejo. Ya estoy acabado".
Así que la búsqueda de los Medias Rojas para un nuevo bateador designado tendrá que seguir. Es hora de traer a la mesa el Plan C, algo que Dombrowski nunca necesitó explorar el año pasado.