Masuoka, que está a 34 kilómetros de revalidar su triunfo, se benefició del retraso sufrido por Peterhansel debido a los problemas con su radiador y con su rueda delantera izquierda, arrancada tras chocar con una roca a poco del final de la decimosexta y penúltima etapa.

"No sé cómo me siento. He conducido hoy con muchas precauciones, porque era un recorrido muy complicado en el que era duro pilotar rápido. Stephane ha sido el más rápido este año y debería haber ganado este rally. Lo que le ha pasado es muy duro. Sé cómo se debe sentir", señaló el japonés.