BARCELONA -- Lionel Messi fue suspendido durante dos semanas de empleo y sueldo por parte del Paris Saint-Germain como respuesta a su viaje, sin autorización del club, a Arabia Saudita. La reacción del líder de la Ligue1 certificaría, en buena lógica, la ruptura definitiva con el astro argentino, quien acaba contrato el 30 de junio y cuya continuidad se entiende imposible. ¿Es una buena razón para pensar en su regreso al Barcelona?
A partir de aquí el futuro de Messi está abierto a toda clase de opciones, especulaciones y rumores. Mantiene una propuesta, aún no especificada en un contrato, de Arabia Saudita, donde el Al Hilal, gran rival ciudadano del Al Nassr donde juega Cristiano Ronaldo, le ha trasladado su disposición a ofrecerle un salario astronómico (algunas informaciones refieren hasta 400 millones de dólares anuales) para sumarse al campeonato.