TAMPA, Fla. - Ni siquiera le preguntes a Didi Gregorius sobre la posibilidad de sustituir al capitán Derek Jeter como el torpedero titular de los New York Yankees.
"Eso es imposible", dijo el juvenil campocorto de los Yankees, quien fue adquirido en un canje con los Arizona Diamondbacks en diciembre del año pasado.
"Derek Jeter es uno de los mejores que hay en el juego. Lo único que puedo hacer de ahora en adelante es salir al terreno y jugar mi propio juego. Eso es todo lo que puedo hacer, jugar fuerte día tras día. Nadie jamás va a hacer lo que hizo Jeter".
El mensaje de toda la directiva de los Yankees desde el principio ha sido que Gregorius deberá enfocarse en ser él mismo y no en que tendrá que sustituir a uno de los mejores jugadores de todos los tiempos.
Es así como a sus 25 años, Gregorius está centrado en establecer su propio nombre en Grandes Ligas y espera que algún día los aficionados puedan pensar en él más allá de ser el jugador que ocupó el puesto del capitán el año después de su retiro.
"Me siento muy orgulloso de estar aquí con los Yankees", dijo el torpedero curazaleño en español, uno de los cuatro idiomas que habla con fluidez además de holandés, inglés y papiamento. "Tengo mucho que trabajar, sólo llevo ocho años como campocorto, y tengo que trabajar en todos los fundamentos, todos los días trabajar para ser uno de los mejores".
Gregorius creció admirando a dos torpederos, Jeter y el veterano campocorto Jimmy Rollins, quien después de 15 años en Filadelfia fue canjeado a Los Ángeles.
"Siempre los admiré porque juegan tranquilos y hacen lo que tienen que hacer en el plato y en defensa y con esa mentalidad puedes llegar lejos en el béisbol", explicó.
Mientras la espléndida defensiva de Gregorius lo llevó a ser uno de los objetivos de los Yankees durante la temporada baja, la realidad es que su bate aún necesita desarrollo, en particular contra lanzadores zurdos.
El torpedero cuenta con un aceptable promedio de por vida de .262 contra derechos, pero su .184 contra zurdos deja mucho que desear. No obstante, el dirigente Joe Girardi cree que el bate de Gregorius tendrá la oportunidad de florecer realmente en Nueva York.
Según Gregorius, sus dificultades contra lanzadores zurdos han sido producto de falta de repeticiones y espera que pueda trabajar en ello, en particular con el consejo de experimentados bateadores de poder como Carlos Beltrán y Alex Rodríguez.
"Todo comienza en la jaula de bateo y estamos trabajando muy duro. Eso es algo que estoy muy deseoso de hacer esta temporada y ver cómo he ido mejorando y en qué otras cosas tengo que seguir trabajando", señaló.