SHANGHAI -- No fue el regreso esperado para Roger Federer en Shanghai. El suizo, sin acción desde el US Open, retornó al circuito en el anteúltimo Masters 1000 del año, pero volvió a quedar en el camino antes de tiempo. Esta vez, cayó en octavos con el francés Gael Monfils por 6-4, 6-7 (5) y 6-3, llevando su récord en la temporada a 36 triunfos y 13 derrotas, contra el 71-12 que hilvanó en todo 2012.
"Fue uno de esos partidos que pueden inclinarse para cualquier lado. Creo que tuve algo de suerte en el segundo set, para ser honestos. Luego jugué un buen tiebreak y conté con algunas chances al principio del tercer set, pero Gael se recuperó y empezó a servir mejor, lo que me complicó un poco las cosas.
Fue una actuación con altibajos para mí", analizó el ex N°1 del mundo.
"Este año he perdido algunos partidos por no poder rendir al 100% -siguió-. Probablemente no debería haber jugado [esas semanas]. Pero no me importa demasiado tener que explicar una derrota de tanto en tanto. Ahora debo seguir trabajando duro para recuperar la confianza y volver a la senda del triunfo".
Monfils también remarcó el tema anímico, aunque aclaró: "Mucha gente dice 'No es el mismo Roger'. Pero cuando está en la cancha, sigue haciendo cosas de las que muchos jugadores ni son capaces".
"Es una gran victoria para mí, aunque me siento un poco triste por él porque sé que está en plena carrera para llegar a Londres -añadió el francés-. Pero esto es tenis. Él va a tener más oportunidades en las semanas que quedan".
En estos momentos, y en virtud de los resultados de Stanislas Wawrinka en Shanghai, Federer está octavo en la Carrera a las Finales ATP (donde defiende final), delante de Richard Gasquet, Jo-Wilfried Tsonga y Milos Raonic, que lo siguen a poca distancia.
De todas maneras, vale recordar que Andy Murray no jugará el torneo debido a su operación en la espalda, por lo cual aun finalizando noveno conseguirá el pasaje a la cita final: "Espero no tener que depender de eso. Si me toca, me toca. Pero realmente no es el modo en que quiero llegar", cerró el suizo.