VALENCIA -- Gran sorpresa en Valencia. El ruso Mikhail Youzhny se convirtió en el nuevo campeón del ATP 500 de Valencia tras derrotar al defensor del título y primer cabeza de serie, e incluso uno de los propietarios de los derechos del torneo, el español David Ferrer, por 6-3 y 7-5, en una hora y 23 minutos de juego.
De esta manera, el ruso alcanzó su décima corona en el ATP Tour, disputadas 21 finales en su carrera. Además, se meterá entre los 15 primeros del ranking mundial por primera vez desde agosto de 2011 (fue octavo en 2008).
Mientras tanto, para Ferrer era su quinta final en Valencia, en la que buscaba su cuarto título. Además, se trataba de su octava final del año y cayó en su sexta consecutiva, desde que triunfó en Auckland y Buenos Aires.
Al de Jávea nunca se le vio cómodo en la pista ante un Youzhny muy sólido en su juego durante todo el partido, que apenas tuvo un bache en el comienzo del segundo set. El moscovita, que perdió en Valencia la final de 2009 ante el británico Andy Murray, conquistó en El Ágora su segundo título de la temporada, mientras que Ferrer sumó su sexta final consecutiva perdida, tras comenzar el año con los títulos de Auckland y Buenos Aires.
Tras un inicio de tanteo, los errores de Ferrer en el cuarto juego que le costaron el servicio marcaron el devenir del set y del partido. Una doble falta, un error no forzado y un resto directo de Youzhny le dieron al ruso las primeras bolas de rotura del partido y comenzó a desnivelar la balanza a su favor.
La habitual seguridad de Ferrer desde el fondo de la pista se resquebrajó y cometió errores inusuales en él. Youzhny se encontraba un partido inesperadamente cómodo tras quebrar el segundo servicio consecutivo del alicantino y situarse 5-1.
Los casi 6.000 espectadores que se dieron cita en El Ágora trataron de levantar el ánimo del jugador local, que a base más de coraje que de juego alargó el set tras romper el saque del moscovita y mantener a continuación el suyo. Pero Youzhny no estaba para más concesiones y firmó un juego casi perfecto para cerrar el primer set con un saque directo.
Youzhny pudo dejar tocado a Ferrer en el inicio de la segunda manga, pero no aprovechó el punto de rotura del que dispuso y se complicó en el cuarto juego. Dos errores y una doble falta dejaron la rotura en bandeja al alicantino.
Los papeles se habían invertido. Ferrer sumó tres juegos en blanco y ahora era Youzhny el que no encontraba su juego ante un rival que con el 4-1 le había cambiado la cara. Cuando mejor pintaban las cosas para Ferrer, Youzhny superó su bache de juego y al español le entraron las dudas. El partido se igualó y por la cabeza de Ferrer sobrevolaron las cinco últimas finales perdidas. La rotura del undécimo juego fue la sentencia para un Ferrer que cedía su corona como Guardián del Ágora.
Gracias a esta victoria, Youzhny ganó más de un título en un año por primera vez desde 2010, cuando se consagró en Munich y Kuala Lumpur. También se convirtió en el cuarto jugador mayor de 30 años en ganar un título ATP en 2013, al igual que Tommy Haas, el propio Ferrer y Nicolas Mahut.