Cinco de junio de 1983. El epítome de la carrera de Yannick Noah. Roland Garros. Ese abrazo eterno con su papá con la bandera de Camerún bien visible en su muñeca derecha. Noah echaba por tierra 37 años sin éxitos franceses en su propio jardín trasero.
Noah venció a Mats Wilander, quien era el campeón defensor, por 6-2, 7-5 y 7-6. Daba la cara luego de que lo hiciera Marcel Bernard contra Jaroslav Drobny años atrás. Este chico surgido de Sedan, una locación al norte de Francia de tan sólo 16 mil habitantes quebraba el paradigma de un hijo de inmigrantes para un país habituado a la colonización.
"En Roland Garros tuve los mejores momentos de mi vida hace más de 30 años", le dijo Noah a CNN en 2014. "Está en mi corazón para siempre. Tengo el mejor momento de mi vida filmado, así que cada vez que lo veo, cada vez que lo pienso, estoy completo ”.
27 de mayo de 1996. Yannick Noah y Henri Leconte caerían ante Olivier Delaitre y Jeff Tarango en la Ronda de 64 de Roland Garros por 7-6, 4-6 y 6-2 para simbolizar el último encuentro oficial como profesional de este personaje ecléctico en el mundo del deporte blanco después de 23 títulos de singles y 16 en dobles.
Sin embargo, esa fecha es un oxímoron. Su retiro “real” fue luego del Masters de París en 1991 cuando cayó en sets corridos ante Derrick Rostagno por un doble 6-3. Allí daría rienda suelta a dos de sus pasiones: ser cantante y capitán de Copa Davis.
En 1996 llevó una vez más al equipo francés a un campeonato de la Copa Davis, derrotando a Suecia por 3-2 en la final celebrada en Malmo. Mientras que en 1997, Noah lideró al equipo de la Fed Cup de Francia para quedarse con el primer campeonato de su historia tras ganar 4-1 sobre los Países Bajos. En 2017 se quedaría con su último título, a día de hoy, tras vencer a Bélgica en la final por 3-2.
“Quiero otra vida con menos estrés, volver a hacer música. Estoy listo para irme ahora. No esperaba haberme divertido tanto”, dijo. Ya sin presión alguna y habituado a no sólo sonreír sino que lo hagan los demás, Noah se embarcó de lleno en otro de sus talentos.
Yannick Noah tiene prácticamente 300 mil oyentes mensuales, sólo en Spotify. Su canción más popular, “Aux arbres citoyens” está a punto de quebrar los 3 millones de escuchas. Lanzó un single en 1990, llamado “Saga Africa” y a partir de allí no se detuvo. “Black & what!” en 1991 llegó en forma de Long Play. Tomando influencia de la música y la cultura de su herencia africana, el tercer disco de Yannick Noah de 2000, llamado como su nombre, marcó su debut en el número uno en Francia, una posición que bancaría varias veces más.
Ah, mientras tanto, en 2005, fue incluido en el Salón Internacional de la Fama del Tenis además de ser parte del segundo concierto global más grande de la historia, el Live 8, organizado por Bob Geldof.
Entre todo esto, Noah obtuvo su quinto número uno con Hommage en 2012, un tributo a Bob Marley. Todavía vigente, luego de 30 años de su debut oficial, su décimo segundo disco -y último hasta el día de la fecha- Bonheur Indigo, alcanzó el número cinco en 2019.
"Cumplí todo lo que me propuse y espero seguir haciéndolo, siempre con alegría”, crack Yannick.