Alomar, ganador de 10 Guantes de Oro y considerado por muchos el mejor intermedista del béisbol, viajará el domingo a Port St. Lucie, en Florida, para acudir el martes por primera vez al campo de entrenamientos con miras a la temporada de la Liga Nacional.

"Este año estoy mentalmente más preparado para jugar con los Mets y físicamente sin ninguna lesión", dijo Alomar al diario El Nuevo Día.

Alomar estuvo entrenando con varios jugadores puertorriqueños de Grandes Ligas en el estadio Juan Ramón Loubriel para estirar los músculos con miras a la nueva temporada.

Tras ser cambiado el año pasado por los Indios de Cleveland a los Mets, el intermedista puertorriqueño tuvo una temporada deficiente en la que bateó para .266 en 149 partidos, en los que conectó 11 jonrones e impulsó sólo 53 carreras.

"Fue un año de aprendizaje para mí. Espero que el 2003 sea mucho mejor", dijo Alomar. "Para eso uno se prepara, para coger lo negativo y tratar de convertirlo en algo positivo".

Sostuvo que no quiere hablar de metas ni de promedios, porque significa que se pondría mucha presión para su segundo año con los Mets, pero cree que la novena mejorará con la adquisición del lanzador abridor Tom Glavine, el relevista Mike Stanton y el guardabosque Cliff Floyd.

Alomar también destacó que la defensiva en el infield mejorará con la adquisición del siore puertorriqueño Ray Sánchez, con el que hará combinación de doble jugadas.

"Tenemos un equipo bastante bueno y acoplado, distinto al del año pasado que teníamos 20 ó 21 jugadores que nunca habíamos estado juntos", dijo Alomar. "Ahora en pitcheo estamos bien y en los bosques tenemos buenos peloteros".

Tras ganar el campeonato de la Liga Nacional en el 2001, los Mets cayeron el año pasado al sótano en la división este con 75 victorias y 86 derrotas.

Este año estrenarán nuevo dirigente en Art Howe, quien sustituye a Bobby Valentine.

Alomar fue dirigido por Howe el año pasado en los partidos que jugadores de Grandes Ligas disputaron en Japón.