"La sociedad no hará ningún comentario sobre el caso Ronaldo", informó un portavoz del club milanés al hacer referencia a que la polémica sobre el brasileño no debe distraer a los jugadores ante su importante cita.

Tras el empate a cero en Lisboa el Inter se juega en este partido de la fase previa una gran parte de los ingresos previstos para esta temporada, por lo que una eliminación sería un duro golpe en términos económicos y deportivos.

"Nos jugamos todo", ha declarado ante el encuentro el presidente interista, Massimo Moratti, quien asegura que el equipo está preparado y que hoy saltará al campo "un Inter grandísimo".

En el estadio milanés de San Siro se espera una gran afluencia de "tifosi", y ya se han vendido 30.000 entradas para el encuentro (de las 47.000 existentes).

Los aficionados del Inter quieren "sacarse la espina" que supuso la derrota en el campo del Lazio (4-2) el pasado mayo, lo que supuso que el preciado "scudetto" fuera a parar al Roma, y obtener una victoria que les haga olvidar las "amarguras" del "caso Ronaldo".

El "Fenómeno" continúa con su programa de entrenamientos en solitario, alejado de sus compañeros, aunque el club ya ha anunciado que a partir del miércoles se reincorporará al equipo.

El entrenador argentino Héctor Cúper asegura por su parte que los jugadores saldrán "a comerse el campo" y que "no hay excusas" para no poder ganar a los portugueses.

"Queremos participar en la Liga de Campeones y no debe pesar el recuerdo de lo ocurrido el pasado mayo", señala Cúper en una entrevista que recoge hoy el rotativo milanés "Corriere della Sera".