Banco Nación levantó su producción en la segunda etapa, pero a su envión anímico le faltó el sustento de la eficacia: sólo un try y varias oportunidades de sumar con el pie despilfarradas por falta de puntería. Y la derrota final por 8-5 significa que no sólo cayó por sexta vez consecutiva en el torneo, sino que se alejó definitivamente de entrar en la Zona Campeonato (a pesar de que había ganado los cinco primeros compromisos del certamen), por lo cual en lo sucesivo deberá pelear por quedarse en Primera, en la Rueda Permanencia.

Champa sí logró el derecho de estar entre los 14 mejores de la URBA, aunque en términos de objetivos y posibilidades, bien puede darse por satisfecho con este logro de evitar la lucha por conservar la categoría.

En cuanto al partido, un espanto, tal malo que los propios jugadores lo admitían entre gestos cómplices...

Lo mejor corrió por cuenta de Champagnat en el arranque, al menos en ese lapso se vieron los escasos movimientos coordinados del desarrollo. Porque Champa, que entró más decidido, lo arrinconó a Banco contra su ingoal, lo tuvo varias veces al borde del try con la percusión que, generalmente, hicieron los forwards o Nicolás Battilana por el centro de la cancha.

Sin embargo, careció de contundencia para reflejar en el tanteador esa supremacía. Gonzalo Aguirre aprovechó bien una maniobra de varias fases y concretó y, luego, Iván Hansen acertó su único penal disponible.

Hubo reiteradas situaciones para los de Pacheco que no supieron rubricar por malos pases, apresuramiento o desprolijidades de manejo.

Del otro lado, Banco no sabía cómo salir de ese asedio: perdía la pelota en situaciones de contacto y, para colmo, cerca de su meta. De todos modos, conservó la esperanza porque, en definitiva, su rival lo aventajaba por apenas ocho tantos.

En la segunda parte, se vino Banco, más aún cuando consiguió su try (line y maul que depositó a Martín Fierros en el ingoal) en el arranque. Pero a partir de entonces todo fue un compendio de horrores compartidos, situación que se agravó para Banco porque no hallaba la manera de quebrar un adversario que ya había perdido la compostura y, encima, estaba obligado a efectuar un cambio tras otro a causa de una seguidilla de lesiones.

Ante la falta de puntería inicial de Eppestein, el capitán Aschero asumió la función de pateador, pero el resultado fue el mismo. Y con el último penal desviado (era fácil y favorable para un zurdo como Aschero) se le cerraron las puertas del empate y la clasificación.

SÍNTESIS DEL PARTIDO

BANCO NACION (5): Matías Carrizo; Lalli, Fonso Reyes (32m ST, Rodríguez Lehman), Aschero (capitán) y Nicolás González; Eppestein y González Brau; Martín Rodríguez, Fierros y Falchi; López y Figini (ST, Serrano); Belli (ST, Hevia), Cambiasso y De Luca. Entrenador: Ferrari.
CHAMPAGNAT (8): Marcos Galli; Máximo Galli, Aguirre (30m ST, Baca Castex), Battilana (capitán) y Suárez (10m ST, Moro; 27m ST, Fortini); Hansen y Valiente; Tomaghelli (5m ST, Achával), Bajlec y Durand; Lugano y Pigretti; Balzano, Facundo Villanueva y Canese (28m ST, Federico Villanueva). Entrenador: Rouco Oliva.