La superestrella de los Sixers continúa jugando con un desgarro parcial del menisco lateral en su rodilla y a pesar de ello mantiene el nivel que necesita su conjunto
Todos tenemos un mensaje para Joel Embiid. Es loable lo que hace, pero a la vez hay que tener mucho cuidado.
Aunque Doc Rivers no esté muy preocupado por lo que está ocurriendo con su superestrella, las palabras desgarro y menisco, siempre causan cierto grado de inquietud y probablemente con un par de días de descanso no sane totalmente.
Mientras tanto los Philadelphia 76ers tienen que conformarse con lo que el pívot pueda brindarles que hasta el momento ha sido mucho mejor que lo que aportó en la primera ronda.
Embiid está promediando 30.8 puntos y 12.3 rebotes en los cuatro partidos de la serie ante los Atlanta Hawks, incluyendo un cuarto partido de 17 puntos y 21 rebotes, donde admitió que siente molestias en la rodilla, dando su peor segunda mitad de la temporada con cero aciertos en doce intentos desde el campo (4-20 en total).
La serie regresa al Wells Fargo Center este miércoles con la esperanza de que la rodilla de Embiid no siga dando problemas y pueda ser ese hombre clave que conduzca a los Sixers a ponerse por delante en la serie.
Dwight Howard estando con los Houston Rockets en 2015 también sufrió una lesión de menisco que lo limitó en ese serie de postemporada ante los eventuales campeones, los Golden State Warriors.
“Creo que él (Embiid) va a regresar y va a tener un fantástico partido. Él va a dominar la pintura y es lo que vamos a necesitar para llevarnos el partido”.
Y así como un veterano de la talla de Howard tiene fe en Embiid, por igual los fanáticos de Filadelfia esperan que su centro estrella (quien figuró en el segundo equipo All-NBA) pueda dejar sus dolencias atrás, o por lo menos soportarlas, ante un equipo de los Hawks que les ha dado más batalla de lo que pensaban.