Argentina, anfitrión de esta decimoquinta edición, que ha perdido ante Francia (1-3) no podrá revivir el sueño de hace también veinte años y en este mismo escenario.

En aquella ocasión, argentinos y brasileños compartieron las semifinales con la extinta Unión Soviética y Japón. El equipo argentino, que entonces dirigía coreano Young Wan Song, cayó ante los ex soviéticos por 3-0, mientras que Brasil se deshizo de los nipones (3-0) y accedió a la primera y, hasta ahora, única final de su historia (fue subcampeón).

Ahora Brasil volverá a revivir aquella experiencia, tras superar el mayor de los retos: desbancar al tricampeón mundial, una selección italiana que jugó al más alto nivel pero que, esta vez, tuvo que inclinarse ante la mayor eficacia de los hombres que entrena Bernardo Rezende "Bernardinho".

Los titulares previos al encuentro ya se anticipaban a la trascendencia del encuentro y al potencial de los contendientes. "Es la guerra". "Será un partido inolvidable". Y así fue.

"Este es el Brasil que todos soñamos, con garra, con motivación e ganando siempre", declaró un emocionado Giovane Gavio, decisivo en la victoria de su equipo.

"Si el partido hubiese terminado con un 3-0 no sería tan bueno y gratificante", reconoció el veterano jugador, campeón olímpico en Barcelona 92.

"Este fue mi tercer partido contra Italia en un Mundial. Nunca le había ganado. Ahora lo he logrado", replicó su compañero, Maurício Lima.

Brasil había conseguido poner fin, en cinco sets, a doce años de ininterrumpido reinado de los italianos.

Dentro de veinticuatro horas, Brasil saltará de nuevo a la cancha. Será para enfrentarse a Yugoslavia, actual campeón olímpico y europeo, que le aguarda en la primera de las semifinales.

Los yugoslavos solventaron sin excesivos apuros su compromiso ante Portugal (3-0) en cuartos y, acceden a la penúltima ronda, sin toparse con adversarios de su nivel.

Será el tercer enfrentamiento de ambos en un Mundial. El primero fue en el Mundial 70, en partido por los puestos 9 al 16, Brasil venció por 3-1. Y, en su segunda cita, en el Mundial 62, Yugoslavia logró la victoria por 3-2, en un encuentro de la primera ronda.

La selección argentina, por su parte, dispondrá de una jornada de descanso antes de afrontar, ante Grecia (que cayó ante Rusia por un claro 3-0), el partido de clasificación por los puesto 5 al 8.