El mítico Enrique Vázquez abogó por que el atacante pudiera seguir, pues apenas estaba por demostrar su mejor talento
Uno de los grandes pilares que tiene la Liga Deportiva Alajuelense es el extremo Carlos Mora, quien se ha encargado de marcar goles y causar desequilibrio en las defensas rivales para haber llevado a los rojinegros hasta la Gran Final que disputarán ante Saprissa.
El atacante de 22 años tiene sus orígenes en Escazú donde jugaba fútbol con el Comité Cantonal de Deportes y también futsal. Fue en unos Juegos Nacionales donde el legendario visor de la Liga, Enrique Vázquez lo vio jugar y quedó atrapado ante su velocidad y empuje para ir al frente.
Ahí mismo se puso en contacto con su entrenador, Jervis Drummond, así como con su entorno y una vez terminó la cita futbolística lo trajo a Alajuelense junto con otro futbolista Ariel Arauz (jugador de Guanacasteca) para que pudieran desarrollarse en el Centro de Alto Rendimiento donde afortunadamente logró dar el salto de calidad.
“Me gustó que era un tipo encarador que son extremos que se han ido perdiendo en el país y es que hasta de lateral derecho lo visualicé, con esa idea lo recomendé y así lo estuvieron observando entrenadores como Cristian Oviedo y Mauricio Montero”, dijo Vázquez a ESPN.
Su rol ha sido sobresaliente en este Clausura 2023 donde suma siete goles y ocho asistencias, sin embargo fue en las semifinales y final donde hizo que la afición se rindiera a sus pies con dos tantos ante Cartaginés y uno ante Saprissa.
Para Vázquez su buen nivel se debe a la continuidad que ha tenido con Andrés Carevic y esto le ha aumentado la confianza.
“Para que se desarrollen hay que darles minutos y entre más estén en la cancha más se desarrollan y es el mismo caso de Alcocer que con oportunidad se han desarrollado mucho”, dijo.
“Creo que es la confianza que ha tenido y con el apoyo que le ha dado el técnico y jugadores, eso lo ha motivado y por eso lo está haciendo de la manera que lo está haciendo”, agregó el formador.
Sin embargo, no todo fue fácil para Carlos Mora en Alajuelense, sus primeros meses fueron difíciles y estuvo a punto de ser separados en divisiones menores, pero el testimonio de Enrique Vázquez ante Agustín Lleida marcó mucho la diferencia, pues el español dio visto bueno para que se quedara ante las dudas de su entrenador en aquel entonces.
“No todos son buenos a las dos semanas, algunos necesiten meses o un año y hay que tenerlos preparados, esas han sido mis virtudes que he tenido mucha paciencia porque a Carlos Mora al principio no les gustaba y es que claro el muchacho creía que corriendo como loco se iba a ver bien y yo le decía que le bajara la intensidad, que fuera más pausado porque sí, en el uno contra uno era muy potente, pero a veces hay que tener pausa, hacer un giro y apoyarse y otras series de cosas, pero sí, estuvo en alitas de cucaracha a punto de que lo corrieran y yo seguí insistiendo, ya gracias a Dios vino Agustín y le dije que había que visualizar a este muchacho”, explicó.
El tiempo le dio la razón a Enrique Vázquez y Carlos Mora alzó vuelo hacia ser una de las piezas más importantes de Alajuelense y así como a este muchacho le está yendo bien, siempre se alegra cuando algún jugador al que le puso la mirada le va bien como lo fue en algún momento Bryan Ruiz, Pablo Herrera, Patrick Pemberton y actualmente Josimar Alcocer.
“Me siento orgulloso y agradecido con Dios y con ellos porque en algunos momentos hemos tenido que hacer sacrificios como traer a jugadores a vivir a mi casa como Patrick Pemberton, Marco Ureña que en aquella época la situación económica de estructura para traerme a jugadores de esas distancias era de locos. Me siento orgulloso de que tuvieron la valentía de que aguantaron un sinfín de cosas difíciles y sin embargo, triunfaron”, sentenció el formador.
Enrique Vázquez siempre ha estado ligado a la Liga Deportiva Alajuelense desde 1965 cuando llegó como un chico de once años y desde eso no ha dejado de buscar aportar al club desde cualquier vertiente y la visoría de talento se convirtió en su principal fortaleza.
En la actualidad sigue trabajando para el club, a pesar de haberse pensionado hace un par de años y sigue feliz de recorrer el país para descubrir a nuevos talentos como Carlos Mora.