MADRID -- El delantero del Atlético de Madrid Luis Suárez declaró en una entrevista exclusiva con ESPN que le duele la situación que está atravesando el FC Barcelona en las horas previas al partido que le enfrentará el sábado a su ex equipo en el Metropolitano.
El uruguayo también habló de lo extraño que será para él no jugar frente a Lionel Messi vistiendo la camiseta del Barça y recordó cómo se portó Ronald Koeman en su salida del club hace un año.
- Luis, ¿cómo llega el Atlético a un partido tan importante?
- El Atlético-Barcelona es siempre un partido muy difícil. El equipo que juegue mejor durante más de 90 minutos se llevará la victoria. No podemos distraernos ni un minuto. Tras el resultado del otro día, la moral del equipo es realmente buena, con mucha confianza y lo vimos la semana anterior después de darle la vuelta al partido contra el Getafe. Sí que es cierto que, luego, perdimos contra el Alavés. Tenemos que intentar no volver a cometer el mismo error.
- ¿Qué has aprendido de este inicio de temporada? ¿Qué tienen que mejorar?
- Tenemos que ser conscientes de lo importantes y difíciles que son los primeros minutos. Si no comienzas con autoridad y convicción, presionando al oponente en los primeros instantes... Eso marca la pauta del juego. Ahí es donde te vuelves fuerte y confiado. Los primeros minutos son muy importantes.
- Algunos aficionados piden que no cierren los partidos a los últimos minutos...
- (Risas) ¡No deberíamos tener que esperar hasta los últimos minutos! Pero de todos modos, estamos acostumbrados. En el Atlético ese es el lema, no dejes de creer hasta el final. Depende de las circunstancias del partido, pero los jugadores y el entrenador tenemos que intentar corregir eso, no deberíamos de sufrir tanto. Pero también es la realidad, por eso hay que valorar ganar la Liga el año pasado: no es fácil, hay que luchar hasta el final, el futbol es muy difícil hoy en día y La Liga aún más.
- Pero sabe aún mejor cuando lo haces así, también hay que admitirlo...
- ¡Sabe mejor cuando ganas! En el momento es un sufrimiento, pero obviamente si ganas, sabe mucho mejor.
- En el Atleti eres líder en el equipo, te involucras mucho en el campo. Estás feliz, ¿verdad?
- Sí, estoy feliz y lo estoy disfrutando mucho por tener la confianza de los compañeros, del staff, de la afición. Ellos confían en tu potencial y en lo que puedes aportar. Esté físicamente bien o no, ellos creen en ti y eso me hace sentir feliz e importante.
- Conoces al Barça mejor que nadie. Viendo cómo está el Barça, ¿cuál podría ser la clave del partido?
- Tendremos que tener cuidado. A pesar del estado de forma en que se encuentran y que su moral no es buena, se ha hablado de muchas cosas en las últimas semanas. Ganaron el fin de semana, hubo algo de euforia y luego volvieron a perder (el miércoles) y eso duele, pero el equipo tiene que tener carácter, hay que luchar para darle la vuelta a la situación y creo que los jugadores tienen su orgullo. Tenemos que tener mucho cuidado. Intentaremos aprovechar el momento en el que se encuentran ahora. Son momentos difíciles pero tampoco te puedes dejar llevar.
- Al ver cómo trataron tu salida y la de Leo (Messi), ¿tienes aún más ganas de ganar?
- Soy un jugador al que le encanta esta profesión. Me dedico al 100% o al 150% a la camiseta que llevo en este momento. Luché muchos años por el Barcelona con orgullo, incluso me hice hincha del club, pero ahora lucho por el Atlético de Madrid, que me abrió sus puertas después de la forma en que salí del Barcelona, y lucharé por ellos hasta que ya no pueda porque me siento feliz, amo mi trabajo y no me importa qué oponente tengo frente a mí.
- ¿Todavía te duele la forma en que Koeman te trató?
- Lo dije en ese momento y así fue como lo hicieron. Le di mucho al club y no creo que me mereciera que me trataran así. Tienes que sentarte conmigo, uno a uno, y explicarme todo. No me digas que si la rescisión de mi contrato no se hace el miércoles, contarás conmigo contra el Villarreal. O una cosa o la otra. Me mandaron al campo de entrenamiento 3 y al 4 para entrenar solo. Por supuesto que son cosas que no olvidas. Pero no debería pensar sólo en eso, sino en hacer bien mi trabajo, demostrando que puedo seguir luchando por cosas importantes. Todo lo que hice el año pasado con el Atlético está ahí y ahora lo seguiré demostrando en los momentos importantes.
- ¿Llegan al partido como favoritos?
- No, no lo creo, no hay favoritos. El otro día perdimos contra el Alavés, que estaba último en la tabla. Éramos los favoritos. Partidos como el Getafe, el Alavés, son partidos que te dan la Liga, son importantes. Pero en los partidos contra tus grandes rivales muestras tu nivel y te pruebas a ti mismo. Estos encuentros dicen algo sobre el equipo y los jugadores individualmente. En estos partidos tienes que luchar.
- ¿Tú y Antoine Griezmann, que han jugado allí, miran lo que está pasando en el Barça y ven lo que era antes, hace dos años. ¿Ya notaron cosas que les podrían haber llevado a estar en esta situación?
- Veamos. Los dos somos conscientes de que en Barcelona estás en un equipo muy grande, que no mostramos nuestro nivel ese año que perdimos (8-2) ante el Bayern. Sí, somos conscientes y muy críticos como jugadores. Somos los responsables. Una cosa es perder y otra es cómo se pierde. Sí, tienes que ser autocrítico. Pero luego hay que valorarlo. No es fácil ir a Barcelona y mantenerte al nivel que yo estaba, por ejemplo. Cualquiera puede ir al Barcelona pero la cosa es mantener el nivel, con las exigencias de ese club. Tengo que estar orgulloso de eso. Me duele ver lo que pasa en el club. Me duele como aficionado que soy, porque le tengo mucho cariño al club. Me lo dio todo, confió en mí en un momento difícil de mi carrera. Me duele por mis amigos allí, por las amistades, por la gente que trabaja en el club a diario. Duele, sí.
- Viniste aquí, eres importante, ganaste la Liga y esta temporada estás marcando goles. ¿Es el Atlético un oasis de felicidad para ti?
- Para mí y para mi familia también. Veo la felicidad cuando me ven en el campo. Es difícil estar de mal humor porque hay un ambiente espectacular dentro del equipo. Todo es positivo, no hay nada malo. Eso es lo que te hace sentir amado en una familia. Luego intentas rendir al máximo y mostrarle a la gente que somos felices viviendo con esa presión de ganar y no aburrirte de ganar. Tengo muchos trofeos a nivel individual, pero no me aburro: me gusta ganar y me gusta el reto de seguir ganando.
- Esa mentalidad ganadora de mantenerse a ese nivel, temporada tras temporada, se nota en el campo.
- Es lo que me puso ahí. Desde niño me costó mucho llegar al más alto nivel, seguir creyendo y peleando hasta el final. Me hizo así. Cuando las cosas van mal, tengo más ganas de hacer las cosas bien. Siempre he sido así.
- ¿Cuántos goles marcarás el sábado?
- ¿El sábado? ¡Con que el equipo gane es suficiente! Si tengo la oportunidad de marcar, genial, pero si el equipo gana, estaré muy feliz.
- ¿Será extraño jugar contra el Barça sin ver a Leo jugando de blaugrana?
- Sí, ahora mismo, sí. El año pasado fue raro volver al Camp Nou y verle jugando en frente por la relación que tenemos. Ahora será extraño no enfrentarse a él con la camiseta del Barcelona. Pero las cosas pasan por una razón y hoy él está en París y yo en el Atlético. Y hace un año estábamos juntos en Barcelona.
- Estáis hechos de la misma pasta, ¿eh?. Vas al Atlético y ganas la Liga; él va con Argentina y gana la Copa América, luego marca su golazo contra el City del otro día.
- Soy feliz como amigo y como aficionado al futbol. Me encanta verlo feliz y divertirse marcando goles. Es un momento complicado porque los cambios son difíciles, y obviamente cuesta al principio, pero verlo sonreír y divertirse como el otro día, como amigo, me encanta.