Al momento del silbatazo final, jugadores del Inter y Atlas se enfrascaron en un intercambio de empujones
MIAMI -- Durante los últimos instantes del encuentro entre Inter Miami y Atlas se desató una trifulca. El gol agónico de Marcelo Weigandt provocó que los jugadores de ambos equipos se enfrascaran en una serie de discusiones al concluir el partido, lo que provocó el ingreso a la cancha y la intervención del guardaespaldas de Lionel Messi, quien participó en la bronca contra elementos del Atlas.
En el minuto 95, Messi apareció en una jugada colectiva junto a Luis Suárez, que culminó con la anotación de Weigandt. La acción fue revisada por el VAR, ya que inicialmente se había señalado fuera de juego. No obstante, tras varios minutos de análisis, el tanto fue validado y concedido al Inter Miami.
En la celebración del gol, Messi abrazó a sus compañeros mientras intercambiaba palabras con el delantero de Atlas, Matías Cóccaro. Ambos ya habían tenido varios cruces durante el partido, y la anotación fue el detonante para esta eufórica reacción.
Aunque se añadieron algunos segundos más al encuentro, no hubo tiempo para mayores acciones. Con el silbatazo final, la discusión entre los dos equipos continuó y fue subiendo de tono. Los empujones y reclamos entre jugadores obligaron al guardaespaldas de Messi a intervenir, ingresó al campo para empujar a los futbolistas de Atlas y tratar de poner fin al altercado.
Ya en la conferencia de prensa, Gonzalo Pineda, técnico del Atlas, aclaró que el tema se quedó en la cancha y no pasó a mayores. "Sí me sorprendió un poco la alegría de Messi por ganar este partido, él que ha ganado tantas cosas, me sorprendió ese festejo tan efusivo que tuvo, porque normalmente es muy mesurado, es alguien que admiramos por esa mesura que guarda en casi todos los momentos del juego, es muy cerebral su juego, y me sorprendió un poco su reacción, pero creo que son cosas de futbol que para mí ahí se quedan".
