Claro y contundente. “Hemos empezado mal el año”. Las expresiones del técnico de Peñarol, Diego Aguirre, son elocuentes. Su equipo perdió los dos clásicos que disputó -un amistoso y otro por la Supercopa Uruguaya- y se retiró del verano sin ganar un solo partido. Y el momento del equipo de Diego Aguirre genera una interrogante: ¿Qué le pasa a Peñarol?
Entiendo que esto recién empieza y que el equipo necesita tiempo de trabajo y rodaje, es claro que el Peñarol 2025 perdió la columna vertebral de su sector defensivo.
El golero Washington Aguerre, el central Guzmán Rodríguez y el volante más posicional del equipo, Damián García, ya no forman parte del campeón.
Si algo había marcado la campaña de Peñarol en 2024 fueron los pocos goles que recibió. Ello habla a las claras de un excelente trabajo defensivo. Con el detalle de que al equipo de Aguirre le remataban poco al arco.
Está claro que los jugadores que ingresaron en lugar de los que se fueron necesitan tiempo, pero hay aspectos llamativos como las declaraciones de algunos dirigentes que, previo al clásico, salieron a decir que era posible el regreso del golero Washington Aguerre. Las expresiones no ayudan en un momento donde el golero que está atajando, Guillermo De Amores, convive con el rumor tribunero y bajo la sombra de Aguerre.
Una vez más tuvo que salir el técnico Aguirre a aclarar la situación diciendo que ya tiene el plantel armado. “De ese tema prefiero no hablar, ya hablé”, dijo.
Otro aspecto diferente con relación al año pasado es que los laterales de Peñarol no gravitaron en ofensiva. El técnico arrancó el año con Damián Suárez como lateral derecho en el lugar donde estaba jugando Pedro Milans.
Quedó claro que tanto Suárez por derecha, como Maximiliano Olivera por izquierda, prácticamente no desbordaron. Esto dejó al equipo sin el vértigo y la agresividad que mostró el año pasado por las bandas.
En ofensiva, Peñarol generó. De pronto menos de lo esperado, pero generó al grado tal que transformó a Luis Mejía en figura en ambos clásicos salvando varias situaciones de gol. No la embocó, como dijo Aguirre: “Faltó que entrara la pelota”.
Está claro que, si bien Peñarol mantiene la base del año pasado, debe mejorar desde el punto de vista defensivo. El equipo sintió las bajas de Aguerre, Guzmán Rodríguez y Damián García.
Diego Aguirre lo tiene claro: “Lo primero es asumir el momento difícil que ha sido este comienzo, que volvamos a ser nosotros y podamos demostrar la calidad que estos jugadores ya han demostrado. Estos jugadores son los mismos que nos dieron un gran año, más allá de alguna baja. Esperábamos empezar de otra forma, pero esto es largo y la confianza mía en los jugadores es total porque ya me han demostrado cantidad de veces cosas muy buenas. Hay que trabajar y rápidamente intentar comenzar bien el Apertura el próximo fin de semana. Esta adversidad no me genera dudas”.