LAS VEGAS - Nick Díaz nunca ha sido de los que se guardan algo por dentro, ya sea en la jaula o hablando con los medios.
El miércoles, tres días antes de que regrese al octágono después de más de seis años fuera, Díaz habló de su "resentimiento" hacia las artes marciales mixtas, se preguntó en voz alta por qué incluso va a pelear contra Robbie Lawler el sábado en UFC 266 y mantuvo su desprecio por pelear.
"Toda la gente a mi alrededor y todo el dinero y los patrocinadores, no me dejan alejarme de las peleas", dijo Díaz en una entrevista con Brett Okamoto de ESPN. "Hay cosas que podría hacer, pero eso no va a funcionar. Bien debo ir y recibir mis golpes ... No quiero mirar atrás y decir, '¿Por qué no lo hice?' No me siento bien. Me siento bien para pelear. No me siento bien con todo [lo demás]. Si no hago esto, no sé cómo me voy a sentir conmigo mismo".
Díaz, de 38 años, dijo que durante su tiempo fuera tenía planes de abrir un gimnasio y enseñar a los estudiantes, y tal vez incluso viajar y hacer seminarios. Pero dijo que las cosas no funcionaron con los socios comerciales con los que estaba tratando y que los planes eran "falsos". Eso es lo que lo llevó de nuevo a pelear.
"Es lo que hago", dijo Díaz. "Traté de alejarme, pero en realidad es algo inevitable".
Díaz nunca ha sido tímido al hablar de sus sentimientos encontrados hacia las MMA. Uno de los peleadores más populares de UFC, Díaz dijo que sabe que los fanáticos están emocionados de verlo competir nuevamente y que los ama. Pero Díaz ha dicho durante más de una década que no le gusta pelear y que el tiempo fuera no le ha hecho cambiar de opinión. Díaz no ha competido desde una pelea con Anderson Silva en UFC 183 en enero de 2015.
"Voy a entrar a ganar", dijo Díaz sobre la pelea del sábado contra Lawler. "¿Me siento confiado? Nunca. Nunca lo he hecho. Siempre siento que me van a destrozar. Cada pelea que he hecho. '¿cómo te sientes contra Robbie Lawler?' Siento que me van a dar una paliza. E incluso cuando gano, me golpean peor".
Díaz fue más allá y dijo que ni siquiera debería estar peleando contra Lawler en primer lugar. Díaz ya venció a Lawler, en 2004, y el nativo de Stockton, California, cree que debería estar desafiando a Kamaru Usman por su título de peso welter de UFC. A pesar de todas las dudas, Díaz dijo que todavía cree que es el mejor peleador del mundo. El hecho de que crea que Lawler podría vencerlo no significa necesariamente que Díaz crea que perderá.
"Creo que le daría una paliza a Usman", dijo Díaz. "Tendré una mejor oportunidad contra Usman que contra Lawler, solo porque ya vencí a Lawler. No tiene sentido para mí entrar y pelear contra Robbie Lawler nuevamente. No sé por qué estoy haciendo esto. ... Esto no debería suceder. Quienquiera que se haya inventado esto es un idiota. No sé por qué estoy haciendo esto. No sé por qué pasó esto. Debería estar peleando contra Kamaru Usman, y eso es todo".
Díaz (26-9, 2 NC) estuvo sin victorias en tres peleas antes de su ausencia de seis años. Su última victoria fue contra BJ Penn en 2011. Aun así, Díaz sigue siendo un favorito entre los fanáticos de las MMA. Ganó 11 combates seguidos en un momento, es ex campeón de peso welter de Strikeforce y es conocido por su estilo de acción hacia adelante.
Díaz claramente tiene dudas sobre volver a competir, pero agregó que Lawler "no se merece que le pateen el trasero y sé que voy a darle una paliza". Díaz dijo que cree que es más peligroso ahora que hace seis años. Pero eso no cambia su relación con MMA en sí.
"Tengo mucho resentimiento hacia el deporte por quitarme tanto y no devolver nada", dijo Díaz. "Esto es genial. Están promocionando esta pelea. No esperaba ser el evento principal ni nada de eso".
Díaz dijo que solo está siendo real. Dijo que todos los peleadores piensan cosas similares en la semana de la pelea, tienen dudas y recelos similares. Pero no lo ventilan como él. Díaz dijo que otros peleadores están "llenos de mie---" y qué si no fingen ser felices durante la semana de la pelea, "deben estar locos".
"Me encanta ayudar a la gente y me encanta ser parte del deporte", dijo Díaz. "Pero no me encanta lo que me ha hecho. Especialmente en los últimos siete meses, los últimos dos años. Así que sí, tengo la oportunidad de arrastrar algo de esto hacia atrás. Así que voy a intentarlo".
"Me siento así en cada pelea. Soy una persona oscura rumbo a una pelea. Simplemente desprecio a estas personas que están felices de salir [a pelear]".