A días del comienzo del Mundial, Mateo Carreras habló en Scrum Mundial sobre cómo es disputar un lugar en el plantel de Los Pumas. Reviví el show completo en Star.
El tucumano recordó sus sensaciones luego de no ser convocado por Michael Cheika: "En la venta de julio del año pasado me quede afuera. No me lo esperaba. Venía de jugar los últimos cinco partidos con Los Pumas y me había sentido cómodo. Decía ‘voy a estar en la primera lista para pelear un puesto’ y cuando dieron la lista, me acuerdo que estaba con mi cuñado y mi novia en el súper, en Inglaterra. Cuando llega el mensaje no dije nada y me fui al auto. Me pego muy duro. Hubo que mirar para adentro, no le hecho culpa a nadie. Qué hice mal o qué puedo hacer mejor para estar con Los Pumas y ganar mi puesto".
"Ha sido mirar y separar mi juego. Soy wing, tengo juego aéreo, juego con el pie y juego con y sin pelota. Empecé a separar así y decir, ‘en esto puedo ser mejor, quiero ser mejor, en esto tengo que ser mejor,’ como obligaciones. Empecé a mejorar y mirar para adentro. Los lunes dejé de mirar los partidos ara ver cómo juega el equipo y empecé a ver qué había hecho mal. Empecé a ser más duro conmigo mismo, por ahí, antes me permitía errores. Empecé a ser más duro conmigo y eso me permitió mejorar mi juego," agregó.
Además, reflexionó sobre la competencia interna por un lugar en el equipo: "Con la lista de Los Pumas llore varias veces, en 2020 y 2022. Preparo todo para esto y no se da. Ahora, estando acá, en el Mundial, viendo lo bueno, por ahí también me saltan lágrimas de emoción".
"En la ventana de noviembre venia de jugar con Newcastele, en contra a todos, y desde el cuerpo técnico me decían: ‘Mateo, te necesito. Hacé esto, hacé lo otro’. Cuando tenés la confianza del entrenador y de todo el equipo, te sentís más cómodo y tranquilo para jugar. En Los Pumas no pasa que te sientas asentado. Le preguntas a Juli (Montoya), como capitán, a Frankie (Gómez Kodela) y Agustín (Creevy), como los experimentado, mismo a Nico (Sánchez), si están tranquilos y te dicen que nunca. La competencia interna es muy alta. Mismo en los entrenamientos, hay chispas puesto por puesto. En lo individual, como wing, trato de ganarle todas las acciones a Juan (Imhoff), a Rodri (Isgró), a Boffe (Emiliano Boffelli), a cualquiera. Somos muy competitivos todos. La competencia está muy alta y eso está bueno, porque hace que no nos relajemos nunca," concluyó.