"Necesito descansar, me han dicho que unos cuatro-cinco días, para luego volver a entrenarme. Por ello, no iré a Hamburgo y me prepararé para Roland Garros", comentó Ferrrero.

El tenista español explicó cuando comenzaron sus problemas: "Sentí el dolor ya en el primer partido del torneo de la Comunidad Valenciana y lo he ido arrastrando desde entonces, durante todo el torneo valenciano y en este de Roma. Pero las molestias me permitían jugar, aunque no al ciento por ciento, ya que no podía servir fuerte".

Ferrero reconoció que el dolor se estabilizó y ello le permitió seguir jugando: "Pero hoy, tras hacer un servicio fuerte en el 5-2, tuve un pinchazo y ya me dolió mucho. Para no jugar el ciento por ciento, no divertirme y fallar, lo mejor era no arriesgar", era inútil seguir.

"Tengo una inflamación de seis milímetros en la parte superior externa del brazo derecho. La verdad es que con los anti-inflamatorios, con los masajes y el ultrasonido se fueron rebajando las molestias. Hasta hoy, cuando creo que también se han notado los muchos partidos jugados y los muchos kilómetros corridos", señaló.