BUENOS AIRES -- No es fácil hablar con Lucas Martín Matthysse. O, para decirlo mejor, no es fácil localizarlo. Solitario y de pocas palabras, “La Máquina” dejó Junín, Buenos Aires, en donde estuvo radicado durante diez años, para marcharse a su ciudad natal, Trelew, Chubut.
En medio de esa mudanza, apareció la confirmación de Eric Gómez, de Golden Boy: “Lucas Matthysse no participará de la velada del 7 de mayo, en donde El Canelo Álvarez peleará con Amir Khan, por un problema en el ojo que por suerte, no es grave”.
Recordar que fue justamente por un problema en el ojo que Lucas Matthysse cayó frente a Viktor Postol cuando se midieron en Carson, California, por el campeonato mundial vacante welter junior del CMB. “Mientras el árbitro contaba, pensé que podía perder la vista, porque sentí como una explosión, y por eso me quedé en el suelo”, explicó luego de la pelea, celebrada el 3 de octubre.
En el programa “Ring Side en el Aire”, que se emite por AM 910, radio La Red de Buenos Aires, Lucas Matthysse dialogó con este periodista, Nicolás Samuilov y Edgardo Rosani. De esta manera, Lucas rompió un largo silencio.
-Hablamos hace una semana con tu hermana, Soledad Matthysse (la ex doble campeona mundial) y nos dijo que tu nuevo entrenador es Mario Narváez (esposo de Soledad y hermano de Omar “El Huracán” Narváez). ¿Es así?
-No, no tanto. Estuve entrenando aquí en Trelew, ayudándola a ella, pero por ahora, creo que mi técnico sigue siendo Cuty Barrera.
-¿Es cierto que te llevaste todo de Junín para radicarte en Trelew?
-Sí, porque en Junín estuve diez años: es mucho tiempo. Yo soy de Trelew y aquí tengo mi casa, y ahora estoy con mi hija, y con toda mi familia, así que decidí volver.
-Debías pelear el 7 de mayo, pero dijiste que no. ¿Qué ocurrió?
-No tengo ganas. El médico me dijo que tengo una lesión en el ojo, pero que no es grave y debo descansar un poco, pero además no tengo ganas.
-¿Estás entrenando?
-No. Todas las mañanas llevo a mi hija (Priscilla) al colegio, a eso de las 7 y media, después vuelvo a casa, almuerzo con mi hija… Pero no entreno.
-¿Ni siquiera corrés un poco después de dejar a tu hija en el colegio?
-No… Igual me cuido con la comida, mi hermana me controla…
-¿Y en qué momento dejaste de tener ganas? ¿A que lo atribuís?
-No lo sé bien, pero siento que después de tantos años de entrenamiento… uno se satura… a uno le gusta subir y pelear, pero todo lo otro, sobre todo el rigor del entrenamiento, se hace demasiado pesado…
-Te gusta tan poco como dar entrevistas o prestarte a la publicidad para una pelea: sacarte fotos, dar conferencias de prensa…
-Es cierto, nada de eso me gusta mucho, aunque haya que hacerlo: a mí me gusta subir al ring y pelear.
-Aunque ahora no tengas ganas…
-No, no tengo ganas.
-Tu derrota ante Postol debe haber influido…
- Perder es muy duro, claro, a nadie le gusta y duele mucho. Esa fue una mala noche, porque no salieron las cosas y así me fue.
-¿Hablaste de esta situación con tu promotor, Mario Arano?
-Sí, hablamos seguido, nos mandamos mensajes, todo eso. Lo que pasa es que, cuando me fui de Junín, él estaba en Brasil para una pelea y entonces no nos vimos personalmente…
-¿Y tuviste ocasión de hablar con Omar Narváez, por ejemplo?
-No, aunque parezca mentira no hemos tenido oportunidad de charla para nada hasta ahora.
-Tal lejos no deben estar, ya que los dos viven en Trelew.
-No, lejos no estamos, son unas cuantas cuadras, pero él anduvo peleando y yo con lo mío y bueno… No nos hemos visto.
-¿Y qué va a pasar con tu equipo de trabajo, en el caso de continuar en el boxeo?
-Creo que cumplí un ciclo y con quien debo hablar es con Mario Arano. En estos momentos no estoy pensando en nada y por lo tanto, no decidí que voy a hacer. Yo ya ando por los 33 años, llevo mucho tiempo en el boxeo, desde que soy un chico, y solamente quiero descansar. Sé que están Cuty Barrera y Matías Erbin, con quienes seguiría trabajando, pero hoy lo que quiero es descansar. Cuando me vuelvan las ganas, veremos…
-¿Qué rival te motivaría como para volver? Eric Gómez dijo que esperaban programarte en septiembre.
-Danny García, con ese sí que querría volver a pelear.
-Él ahora está en peso welter y se dijo que, si regresás, vas a estar en esa categoría.
-Sí, sí: si peleo será como welter.
-¿Y qué harías en el caso de no volver?
-Mi idea es poner un gimnasio de boxeo para chicos, digamos de seis a once años, boxeo no competitivo. No soy millonario, pero lo que tengo me alcanza para vivir a mí y a mi hija, y poner ese gimnasio me gustaría, y espero hacerlo en el futuro.
-¿Y mientras tanto?
-Y… a esperar que me vuelvan las ganas de boxear de nuevo…