Hasta hoy, la filosofía boxística de Chávez ha sido muy simple: "dar y recibir, sabiendo que lo que reciba nunca será tan duro como lo que él dará". Pero no ha inventado nada. Por esa forma tan suicida como emocionante de buscar la victoria, han pasado grandes glorias del boxeo. El éxito de ese estilo no depende tanto de la presión asfixiante que los fajadores le imponen a su ofensiva, más bien, sus éxitos dependen de la respuesta y actitud del rival. La contra estrategia por un lado o la capacidad de contrarrestar con más poder y buena defensa a un estilo de boxeo rústico y previsible son la kriptonita para ese boxeo de puro poder.
En la teoría, anular ese estilo parece posible, pero a la hora de ponerlo en práctica las cosas se complican. No es fácil respetar y desarrollar planes ensayados durante meses ante un rival que va y va y va, acosa, presiona, abruma o si recibe dos o tres golpes no se conmueve y cuando conecta uno solo lastima.
Así es Chávez, una topadora, al que es difícil frenarle el ritmo u obligarlo a modificar su estilo. Hasta hoy, lo ha detenido alguien más fuerte (Andrzej Fonfara) o lo ha complicado alguien con alta escuela técnica (Sergio Martínez). Al resto - en su mayoría - los ha llevado a su territorio siempre, les obligó al intercambio de marronazos de puro terror y les enseñó una resistencia épica antes de vencer en cada una de sus guerras. No sabemos qué ocurrirá ante Saúl Canelo Álvarez, pero pasando en limpio sus fortalezas y sus debilidades, quizás se pueda descifrar el difícil pronóstico de este combate.
LAS FORTALEZAS
DISCIPLINA: Aunque no es una constante en su vida, la fortaleza más importante en Chávez, por ser reciente y por qué cada vez que la respetó se le vieron los resultados, ha sido la disciplina. Lo vimos para su revancha contra Brian Vera y lo volvimos a ver para su última pelea contra Dominik Britsch. Chávez mostró que hay en su desorden personal un límite que le permite ser disciplinado con grandes resultados. En camino hacia la pelea más importante de su carrera contra Canelo, hasta hoy, también ha mostrado mucha disciplina. Nadie sabe si eso se traducirá en un mejor Chávez a la hora de la batalla, pero aquí lo que cuenta es que cuando se lo propone, Chávez puede vencer lo peor de sí mismo mediante ese rubro: la disciplina.
SECUENCIA SOBRE LAS CUERDAS: En lo boxístico, el "Hijo de la Leyenda" reúne atributos naturales de los buenos fajadores, como las secuencias abrumadoras. Es decir, el momento en que se lleva por delante a sus rivales, los obliga a recostarse sobre las cuerdas y suma golpes de poder con las dos manos, a veces, en secuencias infernales.
DOBLE GANCHO, VOLADOS Y GANCHO LARGO POR AFUERA: Otra herramienta muy utilizada en su arsenal es el doble gancho o los volados por afuera con las dos manos o un golpe clásico de la mejor escuela mexicana, el gancho largo por afuera y a las costillas. Si tomamos en cuenta el poder de su pegada y la buena extensión de brazos, cada vez que conecta de esa manera, sus rivales acusan el impacto.
RESISTENCIA Y ASIMILACION: De todos los atributos que hacen la diferencia a la hora de emprender el acoso ofensivo, la resistencia es el mayor de todos. En Chávez Junior la asimilación y el aguante es una cualidad probada y demostrada. Ha estado en verdaderas guerras, donde siempre aceptó y dio golpeo duro. Es el caso - entre otros - de sus peleas contra Sebastian Zbik, Peter Manfredo Jr., Marco Rubio Sergio "Maravilla" Martínez o Andy Lee, del cual recibió terribles ganchos a la barbilla de contragolpe y poca cosa lo conmovieron.
LAS DEBILIDADES
SIN DEFENSA: Es la primera y esencial debilidad de Chávez, la que permite a todas las debilidades. No tiene defensa, tan simple como eso. Parece que su único interés sea proteger el rostro, su bloqueo es endeble y no obedece a ninguna cultura o estrategia boxística. Su aguante compensa pero no oculta el mayor de sus problemas. Cuando retrocede o en aquellos momentos en que debe aceptar golpeo, su defensa es una coladera.
SIN VARIEDAD OFENSIVA: El otro es la falta de una variedad ofensiva, que en su caso, yo lo llamaría de "falta de un filtro a la ansiedad". No tiene Chávez un filtro que regule sus embestidas, son al todo o nada, como una topadora y en esa tozuda marcha hacia adelante recibe muchos golpes a la cabeza. Normalmente él es más fuerte que los rivales, pero cuando da con alguien como Fonfara que lo supera en ese rubro, se termina Chávez. Con Canelo, seguramente no sucederá eso, el tapatío es un mediano natural al que le pondrán libras de musculo para compensar. Pero, cuidado, ello no significa que no nos sorprenda y a la hora del combate, pegue igual que Fonfara. De todas maneras si Chávez sube débil - rehidratación mediante -cada golpe de Canelo será el de un peso pesado.
GANCHO POR ADENTRO: Las anteriores son debilidades generales, pero hay otras que caen en el campo corto, en el escenario breve del puro intercambio y allí el mayor sufrimiento de Chávez ocurre cuando le responden por la calle central con el gancho por adentro. Manfredo, Vera, Zbik y especialmente Fonfara, lo castigaron duro por esa vía. Cuando Chávez apura y el rival cuerpea hacia adentro, siempre la mano que tiene más adelantada queda en posición de dañar con el golpe en gancho, corto y a la barbilla.
IZQUIERDA O DERECHA ABIERTA DESDE ANGULOS: Cuando el oponente tiene la capacidad de salir del acoso por piernas y hacia laterales, por segundos, Chávez pierde toda referencia ofensiva y defensiva. No tiene giro y como una topadora, debe retroceder para buscar al rival en su nueva posición. Al mismo tiempo, la maniobra lo toma abierto totalmente. Algunos rivales, como Sergio Martínez o Brian Vera, cuando conseguían escabullirse por laterales, a veces, lanzaban su mano contraria y siempre lo tomaban mal parado y sin postura adecuada, o sea, sin asimilación.