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La máquina a punto

SIN SOBRESALTOS. Sonriente y con un semblante despejado y tranquilo, Lucas Martín Matthysse recibió una ovación de las cinco mil personas que asistieron al MGM Gran Arena para la ceremonia del pesaje.

Como nos decía Mario Narváes, su entrenador y cuñado, esposo de Soledad Matthysse: “Los deberes se hicieron muy bien, hemos llegado perfectamente a la pelea”. La pelea será ante el norteamericano Emmanuel Taylor, por el título Intercontinental welter AMB, a 10 rounds. Significará también la primera incursión oficial de Matthysse en la división de peso welter. Los dos registraron 66,678 kilos, o sea 147 libras, límite de la división.

Así que, sin apremio alguno por la balanza y tras tres semanas en Indio, California, entrenando con Joel Díaz, Lucas está listo para reaparecer, tras aquella derrota ante Víctor Postol, en octubre de 2015.

“Nunca me fui, solamente me tomé un descanso”, aseguró, aunque en más de una ocasión se especuló con su retiro. “Ahora estoy con mi padre (Mario Matthysse), mi cuñado (Mario Narváes), todo en familia”. Hay que agregar Federico Wittenkamp, su preparador físico. Y, claro, a Joel Díaz.: “Yo me encargaré de organizar la estrategia durante el ring y de darle, claro, toda la energía mental que necesita”.

Atención: Matthysse (37-4, 34 KO) no tendrá un rival sencillo ante Emmanuel Taylor (20-4, 14 KO). El norteamericano nos dijo que no solamente está muy bien preparado y que Lucas es un gran boxeador, sino que se siente campeón. “Soy campeón y estar en la noche del 6 de mayo será muy importante para mi carrera”, aseguró el hombre que hizo gran pelea ante Adrien Broner, perdiendo por puntos.

Mario Arano, apoderado de Lucas, está convencido de la victoria. Y ese, en realidad, es el sentimiento de todo el grupo. Lucas deberá pensar la pelea pero anticipando con su jab, para no dejarlo avanzar a Taylor. Tiene más experiencia y más pegada, aunque también tiene en contra la inactividad.

Lucas subirá nuevamente al ring el 6 de mayo, en el T-Mobile de Las Vegas, como semifondo de una de las peleas más promocionadas del año, entre El Canelo Álvarez y Julio César Chávez Junior.

Dicho de otra manera, si la Máquina está lista para arrancar, no podría haber elegido un lugar mejor.