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Labor épica de Eovaldi se lleva el reconocimiento de los Medias Rojas

LOS ÁNGELES -- Nathan Eovaldi agachó la cabeza al bajarse de la lomita del Dodger Stadium tras haber permitido el cuadrangular de la victoria de Los Angeles Dodgers la madrugada del sábado.

Los Dodgers acababan de dejar en el terreno a los Boston Red Sox, imponiéndose por marcador de 3-2 en un maratónico partido de 18 entradas y 7 horas y 20 minutos, el más largo en la historia de la postemporada.

El compañero de Eovaldi en la rotación, David Price, saltó del dugout bostoniano, y mientras los Dodgers celebraban su improbable victoria, le dio una palmada en el pecho indicándole que no había ningún motivo para no tener la frente en alto.

Los Medias Rojas estuvieron a un solo out de tomar lo que pudo haber sido una prácticamente insuperable ventaja de 3-0 en la serie, pero un solo swing de un héroe llamado Max Muncy tras 18 entradas doblegó a otro héroe, Eovaldi, y mantuvo a los Dodgers con vida en esta Serie Mundial.

Con el abridor Rick Porcello siendo removido del partido tras menos de cinco entradas, el dirigente Alex Cora tuvo que ingeniárselas para utilizar a ocho relevistas a través de las próximas 13 entradas, seis de la cuales fueron lanzadas por Eovaldi.

“Acabo de hablar con él. Le dije lo orgulloso que me sentía de él. Su esfuerzo fue increíble”, dijo Cora en referencia a Eovaldi. “Fue un gran partido. De siete horas, o sea lo que sea. Pero es probablemente uno de los mejores, si no el mejor, juego en el que he participado. Un gran esfuerzo de ambos lados”.

Porcello tuvo una sólida pero breve apertura, permitiendo sólo dos hits en cuatro y dos tercios de entrada, aunque ambos fueron extrabases, un doble de Justin Turner y el cuadrangular de Joc Pederson que les había dado la ventaja mínima 1-0 a los Dodgers llegada la octava entrada.

Tras lo que había sido una espectacular salida del novato Walker Buehler, Jackie Bradley Jr. volvió a vestirse de Superman para los Medias Rojas, conectando un jonrón en contra de Kenley Jansen que le propinó el primer salvamento arruinado de la postemporada al taponero angelino.

El cuadrangular de Bradley Jr. en contra de Jansen fue su décima carrera remolcada esta postemporada, todas con dos outs.

En adelante, el partido continuó igualado 1-1 hasta llegar a la entrada número 13, donde los Medias Rojas aprovecharon un lanzamiento descontrolado y un error en un tiro a primera base para tomar su primera ventaja del partido.

No obstante, la ventaja parcial 2-1 no duró mucho, ya que con dos outs y precisamente con Muncy en tercera base, el jardinero cubano Yasiel Puig conectó una línea que fue fildeada apresuradamente por el segunda base Ian Kinsler, que botó el tiro por primera base, permitiendo que anotara la carrera del empate.

“Pareció perder un poco el equilibrio al atrapar la pelota”, explicó Cora sobre la jugada. “Él es uno de los mejores segunda base defensivos en Grandes Ligas. Ha hecho esa jugada muchas veces y simplemente botó la pelota”.

“Me siento muy mal. Siento que defraudé a mi equipo. Me siento muy mal por Nate. Lo decepcioné a él y al equipo”, dijo un visiblemente agobiado Kinsler al concluir el partido, tras el cual le pidió perdón por su error a Eovaldi.

“(Kinsler) Se disculpó conmigo y le dije que no tenía nada por lo que disculparse”, señaló Eovaldi. “Todos somos un solo equipo, ellos me apoyan a mí, y yo los apoyo a ellos”.

Muncy se llevó la mejor parte cinco desgastantes entradas después, castigando un lanzamiento colgado de Eovaldi que se depositó en el jardín izquierdo en la parte baja de la decimoctava entrada, haciendo que los Dodgers pudieran respirar un profundo suspiro de alivio al obtener su primera victoria en este Clásico de Otoño, colocando la serie 2-1.

Ambos equipos se combinaron para utilizar a 18 lanzadores, nueve por bando, un nuevo récord en postemporada.

Cora utilizó a casi todos sus lanzadores en el maratónico encuentro, con Drew Pomeranz y Chris Sale siendo los únicos que no subieron a la lomita. Ahora el mánager puertorriqueño tendrá que hacer malabares para conseguir 27 outs en el próximo encuentro de la serie.

Al preguntársele quién sería su abridor el sábado, Cora bromeó, respondiendo: “¿Cómo es que se deletrea "TBA"? TBA”. La sigla TBA es utilizada en inglés en lugar de “To Be Announced” – a ser determinado.

Cora afirmó que no se arrepintió de haber sacado a Porcello tan temprano en el partido. Eovaldi, saliendo del bullpen, terminó lanzando más entradas que Porcello, el abridor.

“Lo que hizo Nate esta noche, fue increíble. Eso fue increíble”, dijo Cora. “Pero el partido dicta la forma en que movemos nuestras piezas y a nuestros jugadores”.

“Tenemos a muchos jugadores que están un poco lastimados, pero siguieron dando el máximo”, agregó Cora. “Así que apúntenme para un partido con ese tipo de esfuerzo, desde el primer lanzamiento del partido hasta el final”.

Kinsler estuvo también involucrado en otra de las jugadas decisivas del partido. Con corredores en primera y tercera base con un out en la parte alta de la décima entrada, el segunda base, quien había ingresado como corredor emergente por J.D. Martínez, intentó anotar en un elevado corto al jardín central, pero el jardinero central Cody Bellinger hizo un larguísimo tiro para agarrarlo de out en el plato.

El disparo fue desviado, pero fue atrapado perfectamente por el receptor Austin Barnes, quien le impidió el paso a Kinsler hacia home, evitando una nueva ventaja para los Medias Rojas.

Eovaldi estuvo simplemente excepcional, mereciendo numerosos elogios de sus compañeros, tras echarse al equipo encima lanzando pelota de tres hits en seis entradas, permitiendo una sola carrera, el jonrón decisivo de Muncy, quien fue el líder absoluto de los Dodgers en cuadrangulares durante la campaña regular con 35.

“Tremendo. Increíble. Espectacular”, dijo Bradley Jr. sobre el desempeño de Eovaldi. “Lo quiero a mi lado diez de cada diez veces. No sentimos nada más que amor por él”.

Porcello incluso dijo que se le salieron las lágrimas al finalizar el partido porque lo que hizo Eovaldi fue tan especial. “Literalmente, dio todo lo que tenía en cada lanzamiento. Todos estamos dispuestos a morir ahí afuera. Y Nathan lo mostró esta noche”.