MADRID -- Las Ligas Europeas han iniciado la ofensiva para impedir que la Champions League quede en manos “de los diez grandes”.
Representantes de más de 200 clubes de Europa se han reunido este martes en Madrid con la finalidad de presentar un frente común ante la UEFA e impedir que el nuevo formato de Champions League propuesto por la Asociación Europea de Clubes (ECA) se lleve a cabo.
La nueva competición, que cuenta con el apoyo del organismo rector del futbol europeo y entraría en vigor a partir de 2024, provocaría cambios “demoledores” a las Ligas locales, según el presidente de la Liga española Javier Tebas, pues excluiría a los clubes más modestos de la oportunidad de clasificarse a las competiciones europeas.
“Las competiciones domésticas deben ser la base para las competiciones internacionales a través de la clasificación. De otra manera es imposible mantener el interés de la afición. La gran mayoría de nuestros clubes consideran que los méritos deportivos son los que deben decidir quién puede tomar parte en las competiciones internacionales”, afirmó el Presidente de la Asociación Europea de Ligas, Lars Christen-Olsson en rueda de prensa celebrada tras la reunión.
Por su parte, Javier Tebas reiteró su postura de “parar las reformas” propuestas por el grupo de los clubes más poderosos del continente, pues sería un duro golpe económico y deportivo para los campeonatos domésticos, y sobre todo, para los clubes modestos que “no quieren una competición bajo el amparo de la UEFA”.
La propuesta aprobada por la Asamblea General de la ECA en marzo pasado contemplaría, además, seis fechas en fin de semana, lo que desplazaría a los campeonatos locales a los miércoles, algo que la Asociación Europea de Ligas advierte que será en perjuicio de sus competiciones.
“Tenemos que pensar en la estructura económica porque de un día a otro 16 clubes digan que van a competir en otra competición, no es tan sencillo con presupuestos como el del Barcelona de casi mil millones… Si pagan eso de (derechos) de televisión, claro pero eso es imposible. Se dicen muchas barbaridades y no es tan fácil que de la noche a la mañana se cree una competición. Lo que es fácil es que poco a poco vayan consiguiendo que la UEFA traslade dinero a otro tipo de competiciones, pero no me lo creo”, afirmó Tebas.
Desestiman una ruptura con la ECA, pero desean frenar el cambio
El presidente de la Juventus, Andrea Agnelli, cabeza de la ECA y principal promotor de la nueva Champions League, ha acudido a la reunión de este martes acompañado por Edwin Van der Sar, director deportivo del Ajax, a pesar de haber enviado una misiva a los clubes pertenecientes a su organización en la que solicitaba que no acudieran a la reunión convocada por Tebas.
El Real Madrid, entre otros grandes, no estaba entre ellos. Según Tebas, el club merengue desistió en el momento en que recibió la misiva de Agnelli.
“La postura del Real Madrid la conocemos, aunque no sea oficial”, señaló Tebas, que restó importancia al hecho de no contar con el apoyo del club español con más títulos internacionales, pues según opinó “en la ECA gobiernan los diez grandes aunque 103 miembros tengan derecho a voto”.
Es por ello que Tebas desestimó que los grandes clubes tengan planes de “hacer la guerra por su cuenta” en caso de que las Ligas logren frenar la nueva propuesta.
“No me lo creo. Hoy por hoy, los grandes clubes españoles y de Europa dependen muchísimo de su competición nacional.
Solo se atreverán a dar ese paso el día que económicamente estén seguros que van a ingresar lo suficiente de un día para otro y no lo van a lograr. Otra cosa es que trabajen para que la Liga sea más débil. La pena es que algunos funcionarios de la UEFA se lo han creído”, afirmó Tebas, quien no obstante, reiteró que acudirá a la “vía legal” e incluso a las autoridades políticas de los países involucrados para detener un cambio que, reiteró, “disminuiría el valor de los clubes”.
“Nos queda tiempo (hasta 2024). El escenario sería muy complicado, es la realidad. El proyecto de liga de 18 clubes, de jugar seis fines de semana, y accesos cerrados prácticamente a competición europea. Pues el futbol español disminuiría 45% el valor de los clubes y los ingresos serían menores. Todo se vería bastante afectado”, recalcó.