Napoli confirmó su mejoría con una importante victoria por 2-1 ante Juventus gracias a los tantos de Kvaratskhelia, que volvió a ser el mejor de los del Vesubio, y de Raspadori, que fulminaron al gran rival napolitano de la remota opción de ganar el Scudetto. Para la Vecchia Signora marcó Chiesa.
Un Napoli-Juventus nunca es un partido más, especialmente en el Sur, donde la rivalidad contra los juventinos se eleva a la enésima potencia. Había cuentas pendientes de la temporada pasada, cuando los de Napoli asaltaron el estadio juventino para desatar las celebraciones de un Scudetto del que ya se supo ganador en ese momento.
Y la esperada venganza de los del norte, de los turineses, no pudo ser. Es más, el resultado fue casi idéntico, pues fue Raspadori el que decidió ambos partidos con un gol agónico, el héroe de dos de los días más señalados en el calendario sureño. Mucho más en estos momentos que transita este Napoli, necesitado de puntos, sensaciones y confianza para maquillar la temporada.
Perdonó Vlahovic y no falló Kvara, que de nuevo volvió a ser el jugador más importante de los de Calzona. Un peligro constante por banda que tras una jugada casi perfecta de Vlahovic, una tiro que estrelló en el palo, encontró el primer tanto del partido para confirmar su regreso, su buen momento, su liderazgo. No marcaba dos goles seguidos desde marzo de 2023 y ahora lleva 3 en dos partidos.
Cazó una pelota que había quedado suelta en el área tras el despeje Rugani y la goleó con su pierna derecha al palo de Szczesny, sin tiempo de reacción para el meta polaco.
No se rindió la Juve, que volvió a tener en pies de Vlahovic su mejor ocasión. Robó Rugani en presión alta, el serbio se quedó solo ante Meret y mandó muy lejos la más clara del partido.
La Juve empezó a creerse superior. Cambiaso tuvo otro disparo franco desde dentro del área que se marchó alto. Lo buscó el combinado de Allegri, pero le faltaba pólvora. Y en esas siempre suele aparecer Chiesa, uno de los más activos del partido apareciendo por banda, por dentro y con desmarques en profundidad. Un todocampista que metió la que tuvo.
A falta de 10 minutos cruzó una pelota que colocó en la base del poste, inalcanzable para Meret. Silenció el Diego Armando Maradona y pareció arruinar la noche de Napoli, pero la juventud e inexperiencia de Nonge acabó con todo el esfuerzo juventino.
Un torpe penal en el minuto 88 sobre Osimhen, una patada con el nigeriano de espaldas al arco y casi sin opciones de peligro, sentenció el partido. Falló Osimhen desde los once metros, pero apareció Raspadori en el rechace.
Napoli suma ya 2 victorias seguidas y 4 jornadas consecutivas sin perder. Está séptimo a 3 puntos de Europa, aunque la Champions le queda a 8. Parece un equipo renovado con Calzona y la victoria balsámica ante el gran rival puede suponer un cambio de mentalidad a pocos días de medirse a Barcelona. La Juve, sin posibilidad de Scudetto, tiene que empezar ahora a preocuparse por su segunda plaza.