La última jornada de la primera fase del grupo 4 se presentaba antes de su comienzo apasionante, ya que de ella tenía que salir el segundo clasificado, pues el Olmedo ya tenía asegurado su pase, pero sin conocer todavía en que posición lo haría, mientras que para la otra plaza optaban los otros tres clubes, el América, Atlético Paranaense y Bolívar, este último con escasas opciones.

El estadio Hernando Siles de La Paz fue el escenario del primer partido, con el local Bolívar y el ecuatoriano Olmedo como protagonistas.

El resultado de 2-0 favorable a los bolivianos fue claramente insuficiente para conseguir su pase a los octavos de final pese a que dominaron el encuentro de principio a fin ante un Olmedo relajado y que hizo muy poco para evitar la derrota.

La victoria fue un escaso consuelo para los seguidores del Bolívar, que ha concretado su peor actuación en la Libertadores de los últimos diez años.

En el otro partido del grupo, disputado en Cali entre el América y el Atlético Paranaense finalizó con una contundente victoria de los locales por 5-0, triunfo que los llevó a ocupar el primer puesto final del grupo y hundió a los brasileños, que de esa forma vieron esfumarse sus posibilidades de alcanzar los octavos de final.

El América, sabedor que se jugaban el todo por el todo, no dejó nada a la improvisación y a una posible sorpresa de su rival. Presionó desde el principio y apabulló a un Atlético Paranaense que poco o nada pudo hacer para evitar su particular jornada negra.

En el otro partido de la semana el Sao Caetano brasileño se aseguró su pase a los octavos de final pese a que todavía le queda un encuentro por jugar, ante el Cerro Porteño el próximo 10 de abril, al vencer a domicilio por 3-0 a un Alianza de Lima que va de mal en peor.

Los brasileños no tuvieron demasiados problemas para conseguir la victoria y, con ella, su clasificación matemática para octavos, pues los locales volvieron a mostrar una gran carencia de recursos para frenar a un rival con hambre de victoria.