Se anunciaron las peleas estelares de UFC 320 y UFC 321. Brett Okamoto reacciona a las tres próximas peleas de campeonato.
UFC anunció el martes la base de su calendario de otoño, que incluye tres peleas por el título en octubre.
Alex Pereira intentará recuperar el campeonato de peso semipesado en una revancha inmediata contra Magomed Ankalaev en UFC 320 el 4 de octubre en Las Vegas. En la misma cartelera, Merab Dvalishvili se enfrentará a Cory Sandhagen, buscando su tercera defensa del título de peso gallo en 2025.
Y el recién ascendido campeón de peso pesado, Tom Aspinall, busca dejar atrás la saga de 12 meses que supuso el anuncio de retiro de Jon Jones, con una defensa del título indiscutible contra Ciryl Gane en el evento principal de UFC 321 el 25 de octubre en Abu Dabi.
Aquí reaccionamos a los anuncios de las peleas de campeonato de UFC.
1. Evitemos el nombre "Jon Jones" en la previa de Aspinall vs. Gane.
Tom Aspinall reflexiona sobre cómo se convirtió en el campeón de peso pesado de la UFC tras el retiro de Jon Jones.
Propongo que ignoremos por completo a Jones de aquí al 25 de octubre, ya que probablemente pedirá atención en varios momentos previos a esta pelea.
Jones aguantó la división de peso pesado como campeón durante casi un año, solo para hacer el decepcionante anuncio de su retiro. Con ello, no mostró ningún respeto por el tiempo de Aspinall y probablemente dañó su legado, ya que los aficionados probablemente nunca olvidarán la insatisfacción por aparentemente "esquivar" a Aspinall. Todo esto solo para, al estilo típico de Jones, anunciar su intención de regresar al deporte en 2026.
Jones sigue siendo el mejor peleador de MMA de todos los tiempos, y como escribí cuando se retiró, nunca nos debió la pelea con Aspinall. Tiene derecho a retirarse. Pero la forma en que ha decidido retirarse es absurda, y mientras tanto, otros pesos pesados están listos para competir. Aspinall (15-3) es un auténtico talento de superestrella. Merece toda nuestra atención, aunque no esté relacionada con Jones.
Así que, con todo respeto, ignoremos a Jones antes del UFC 321. No hay razón para mencionarlo cuando Gane (13-2) es el oponente de Aspinall. Jones podría haber peleado contra Aspinall en lo que habría sido el evento más importante del año. Podría haber recibido toda la atención que hubiera deseado, pero decidió no hacerlo. Así que, dediquemos esa atención a Aspinall vs. Gane.
2. El 2025 de Merab Dvalishvili podría superar el 2024 de Alex Pereira.
Con esta victoria, Dvalishvili suma 13 triunfos consecutivos en UFC, consolidando una de las rachas más sólidas de la división.
Es apropiado que ambos compartan este evento de UFC 320, ya que Dvalishvili ha canalizado una gran energía Chama en 2025.
No sé qué tan posible sea que Dvalishvili supere a Islam Makhachev o Ilia Topuria en el ranking libra por libra, pero si vence a Sandhagen (18-5), consideraré subirlo. Puede que Dvalishvili no suba de division de peso como Makhachev y Topuria, pero su actividad en defensas de título es tan difícil como subir de categoría.
Dvalishvili (20-4) ni siquiera quería enfrentarse a Umar Nurmagomedov en enero. En ese momento, quería tomarse un descanso y, según se informa, llegó a la defensa del título con varias lesiones no reveladas. No hubo problema. Dvalishvili no solo sorprendió a Nurmagomedov por decisión en cinco asaltos, sino que en tan solo cinco meses se recuperó para una revancha contra Sean O'Malley, quien estaba muy motivado y bien entrenado para esa pelea. No creo que O'Malley luciera mal en esa revancha; Dvalishvili es simplemente así de bueno. Y ahora Dvalishvili se dirige a su tercera defensa del título en 10 meses. Ese es el comportamiento típico de BMF.
Las historias sobre la primera defensa del título de Aspinall y la oportunidad de venganza de Pereira probablemente eclipsarán la notable actividad de Dvalishvili en otoño. Y es una pena, porque Dvalishvili podría ser el mejor peleador del mundo en este momento.
3. No es la pelea que queríamos para Pereira, pero voy a ir con todo.
Magomed Ankalaev calma a la multitud de Las Vegas al vencer a Alex Pereira por decisión unánime y convertirse en el nuevo campeón de peso semipesado de la UFC.
Me explico. Hubiera preferido ver a Pereira subir a peso pesado para ser el primer oponente de Aspinall.
Tras el retiro de Jones, quería ver a Aspinall en el enfrentamiento más importante posible, que habría sido contra Pereira. Pero Pereira (12-3) es mucho más apto para pelear en peso semipesado en lugar de subir de división, y esta revancha contra Ankalaev (21-1-1) sigue siendo una buena pelea.
Pero no voy a dejar que eso me impida comprar por completo la revancha entre Pereira y Ankalaev. Es la oportunidad de Pereira de recuperarse de una derrota contra el hombre que se le propinó, y eso debería ser suficiente motivación. Es completamente diferente a su larga rivalidad con el gran Israel Adesanya, que incluyó cuatro peleas en MMA y kickboxing.
En 2024, era imposible alejarse de Pereira ni aunque lo intentaras. Peleó tres veces en siete meses y asistió a eventos de UFC cuando no lo hacía. Este año, ha estado prácticamente en silencio desde la derrota ante Ankalev. También declaró que estaba lidiando con varios problemas médicos antes de su primer encuentro. Hay mucha intriga sobre cuán diferente se verá en esta revancha, contra un enfrentamiento estilístico que no le favorece.