El piloto argentino compitió hasta el final por el último escalón, pero quedó cuarto en una dura batalla con Máximo Quiles. Marco Morelli fue 17º y se fue sin puntos. David Muñoz fue el vencedor y José Antonio Rueda puede ser campeón en la próxima.
El GP de Japón ya tenía reservada una complicación extra para el argentino Valentín Perrone: jamás había girado en el circuito de Motegi. El primer entrenamiento libre del viernes fue utilizado por el Coyote para conocer los recovecos de la pista y rápidamente le tomó la mano, tanto, que se aseguró el segundo lugar de partida tras una gran clasificación. Pero el listón de dificultades se elevaría aún más en carrera, cuando en las primeras vueltas cayeron algunas gotitas y la pista fue un jeroglífico, con partes húmedas y otras secas. Con todo ese contexto adverso, el piloto del equipo Tech3 fue gran protagonista de la 17ª fecha y finalizó cuarto, tras luchar por el podio hasta la bandera de cuadros.
Perrone llegó a ser líder de la competencia en la quinta vuelta, cuando el asfalto generaba más de un susto. Pero en la sexta fue superado por David Muñoz, el único que estuvo en otro planeta y se quedó con un triunfo aplastante. Pero detrás, se dio una batalla sensacional entre el Coyote y Máximo Quiles. Sí, uno más.
El español del Aspar y el argentino definieron este año el GP de Hungría, en un mano a mano infartante y definido por ¡18 milésimas! La pulseada se repitió en Misano, cuando pelearon durante un buen rato por el tercer lugar. Y en Motegi llegó la tercera edición de un duelo que promete convertirse en un clásico. Quiles y Perrone peleaban por el segundo puesto, hasta que apareció José Antonio Rueda, quien había partido desde la pole, pero perdió terreno cuando la pista se humedeció. Una vez seco el asfalto, el líder del Mundial voló y pasó a ambos para ser segundo (le sacó 93 puntos a Ángel Piqueras y puede definir el título la próxima semana en Indonesia).
La lucha por el tercer escalón se mantuvo hasta la última curva. Perrone se tiró con todo en la penúltima variante, pero el pupilo de los hermanos Márquez lo sostuvo con lo justo, en una maniobra ajustadísima, y se quedó con el tercer escalón.
Perrone volvió a estar en la pelea bien arriba y su primer triunfo mundialista parece estar a la vuelta de la esquina. Hasta ahora suma dos podios, dos pole positions y marcha octavo en el campeonato. Acumula 121 puntos (lleva 14 carreras seguidas anotando) y tiene chances de meterse en el top 5 al cierre del ejercicio, todo en su primera temporada en Moto3 (ya se confirmó su continuidad con Tech3 para 2026).
"La carrera fue divertidísima. Me sentí genial sobre la moto, lo di todo hasta la última vuelta para intentar subir al podio, pero al final, Rueda y Quiles fueron un poco más fuertes. Al principio, intenté seguir a Rueda, pero fue complicado porque muchos pilotos querían ponerse en cabeza. Cuando empezó a llover, me sentí bien y vi la oportunidad de avanzar y marcar mi ritmo. Entonces Muñoz me adelantó, y estaba un poco loco, así que me tranquilicé y ajusté mi ritmo. Luego, Quiles y Rueda me alcanzaron cuando dejó de llover, y ahí quedé cuarto. Hoy hemos aprendido mucho otra vez, lo disfruté, así que vamos a Indonesia a aplicar todo lo aprendido en Japón", dijo Valentín.
Marco Morelli se fue sin anotar
Marco Morelli volvió al Mundial después de su ausencia en el GP de San Marino, porque debía cumplir con el último compromiso de la Red Bull Rookies Cup. Al igual que Perrone, el otro argentino que tiene el Mundial, jamás había estado en Motegi. Con la Honda del equipo Mlav, Morelli largó desde el 16º lugar y no pudo avanzar en carrera: finalizó 17º y fuera de la zona de puntos. El Gladiador ya tiene asegurado su 2026 con el equipo Aspar, donde tendrá a Quiles como compañero.