GREEN BAY -- Brandon Bostick no tendrá la oportunidad de enmendar su error en el Juego por el Campeonato de la NFC, al menos no con los Green Bay Packers.
El ala cerrada reserva fue cortado este lunes, confirmó una fuente a ESPN, luego que Bostick anunciara en su cuenta de Twitter que su tiempo en Green Bay había terminado.
Bostick tuvo un papel importante en la dolorosa derrota en tiempo extra de los Packers ante los Seattle Seahawks en el Partido por el Título de la NFC. Con menos de dos minutos por jugar y los Packers arriba en el marcador 19-14, Bostick intentó recuperar una patada corta y dejó que el balón se escapara de sus manos. Los Seahawks recuperaron y anotaron el touchdown que les dio la ventaja.
A pesar que los Packers empataron el partido antes de eventualmente perder en el tiempo extra, el error de Bostick quedó marcado como una de las jugadas más costosas del partido. Si los Packers hubiesen recuperado el balón, podrían haber consumido el tiempo en el reloj y avanzar al Super Bowl.
Bostick ni siquiera tenía que intentar recuperar la patada corta, se suponía que bloquearía para asegurarse que el balón llegara a las manos seguras de Jordy Nelson, quien habría tenido el camino libre para tomar el balón si Bostick no se hubiese interpuesto en su camino.
Un día después del partido, Bostick dijo que estaba "tratando de lidiar con esto" y tenía la esperanza de que tendría la oportunidad de dejarlo atrás. "Saldré delante de esto, volveré aquí y trabajaré duro e intentaré dejar esto atrás de mí", declaró Bostick el 19 de enero.
Bostick fue visto alguna vez como un prospecto prometedor sin embargo sólo atrapó dos pases (uno de touchdown) la temporada pasada. Estaba bajo contrato con los Packers para el 2015 y habría recibido el salario mínimo para jugadores de tercer año de 585,000 dólares si se hubiese quedado en el equipo.
El corte de Bostick es el cambio más reciente de los Packers desde el Juego por el Campeonato de la NFC. Despidieron al coordinador de equipos especiales Shawn Slocum, y el entrenador en jefe Mike McCarthy reestructuró su cuerpo de asistentes ofensivas y también cedió el control de llamar las jugadas.