Una vez concluida la Copa del Mundo Francia 2023, el jugador neozelandés de 28 años se unirá al Toshiba Brave Lupus de la Japan Rugby League One, con lo que sería su despedida del seleccionado kiwi, debido a la regla impuesta por la federación en donde solo pueden vestir la camiseta negra aquellos jugadores que compitan en Nueva Zelanda.
Para el apertura, la situación del rugby mundial favorecía a los All Blacks, ya que sus jugadores no querían irse, pero el cambio del contexto y el surgimiento de nuevas ligas menos competitivas, pero más redituables económicamente conspiran en contra de una reglamentación que según su criterio debería ser modificada.
“Nueva Zelanda tendrá que adaptarse mucho más rápido. De lo contrario, los jugadores se irán mucho antes y no podrán representar a su país” comento al respecto a periodistas en Japón. Shannon Frizell, Beauden Barrett, Brodie Rettalick, Damian McKenzie y TJ Perenara son algunos de los exponentes neozelandeses que jugaron o participarán de la liga asiática.
“Hay una mezcla de jugadores que quieren representar a su país y tener una buena oportunidad a nivel internacional, pero también les queda una decisión sobre la vida después del rugby, entendiendo que no hay un gran período de tiempo en el que realmente juegues al rugby" detalló el back de los All Blacks.
No obstante, Mo'unga no le cierra las puertas en forma definitiva al seleccionado. Su contrato se prolonga durante tres años, lo que bien le permite poder lograr grandes objetivos con el Toshiba Brave Lupus y estar disponible para la Copa del Mundo de 2027.