La relación profesional entre Diana Shnaider (11ª de la WTA) y Dinara Safina fue tan efímera como abrupto y misterioso su fin. Increíblemente, la joven rusa duró apenas un mes trabajando junto a su histórica compatriota.
Ahora bien, ¿qué ocurrió? Fue la propia jugadora de 21 años la que se encargó de ponerle los argumentos a una situación que llamó y mucho la atención en un comienzo.
"Todo sucedió de manera espontánea, justo después del partido en Madrid con Iga Swiatek. Ahí Dinara ya me dijo que no vendría conmigo a Roma. Fue una decisión exclusivamente suya", detalló la nacida en Zhiguliovsk, de 21 años, en diálogo con el medio Championat.
Además, la talentoso zurda prosiguió: "Una vez en Roma le escribí para conocer cuáles serían las condiciones a partir de ahora, cómo continuábamos con el trabajo, pero ella me dijo que ya no consideraba ningún tipo de cooperación. ¿Qué puedo hacer? Sucedió así, fue una decisión de Dinara, por mi parte lo respeto y lo acepto".
"Me prepararé para el próximo torneo y buscaré algunas opciones nuevas. No sé qué planea hacer Dinara a continuación, si trabajará con otra persona o se alejará del coaching, pero le deseo suerte en lo que haga", manifestó la dueña de cuatro títulos, todos durante 2024.
Según las palabras de Shnaider la decisión pasó únicamente por la exnúmero 1 del mundo y campeona del Abierto de los Estados Unidos en dobles en el 2007. Esta confesión sirvió, a su vez, para cortar con los rumores de que la razón era por los padres de la medallista plateada en los Juegos Olímpicos de París.
“Mis padres no me dicen nada sobre este tema, pero es muy desagradable tener que escuchar ciertas cosas. Ellos lo pusieron todo para que me fueran bien las cosas, así que están un poco tristes con todo esto. Duele mucho leer estas cosas de mis padres, gente que asegura que me roban todo el dinero, es asqueroso. De hecho, tengo una gran relación con ellos, mis padres son mi apoyo, ojalá todo el mundo tuviera una relación con sus padres como la mía", aclaró la octavofinalista en el US Open 2024.
En consecuencia, la habitual pareja de su coterránea Mirra Andreeva (7ª) detalló: "Siempre habrá personas que suelten cualquier tipo de información, aunque sea equivocada. No sé de dónde saca la gente que mis padres me quitan todo el dinero, que vivo sin dinero o que no pueda pagarme un entrenador. Soy muy escrupulosa cuando toco este tema, incluso siendo menor de edad nadie se llevó mi dinero, ni siquiera saben cuánto tengo en la cuenta”.
A pesar de la corta relación que las unió, la joven categoría 2004 optó con quedarse con las cuestiones positivas que le aportó la campeona de 12 títulos en singles, hermana de Marat Safin, actual preparador de Andrey Rublev (17°): “No hay nada negativo entre nosotras, aunque haya sido un periodo muy corto, lo cierto es que fue muy productivo. Dinara hizo muchas cosas por mí. Me ayudó a trabajar con mis emociones negativas, a mantener la concentración, a enfocarme todo el partido pese a las condiciones adversas, incluso cuando estás perdiendo".
"Trabajamos mucho en todos estos aspectos, así que le estoy muy agradecida por cómo ha compartido toda su experiencia conmigo. A pesar de este corto período de tiempo, seguro que se verán algunos frutos del trabajo conjunto”, concluyó la ex número 2 del planeta a nivel junior.
Por lo pronto, Shnaider comenzó con el pie derecho en el WTA 1000 de Roma. Con dos holgados triunfos, primero por doble 6-0 frente a Caroline Dolehide (20ª) y luego por doble 6-3 contra Jaqueline Cristian (74ª), se metió en los octavos de final para medirse contra la belga Elise Mertens (24ª) e intentar alcanzar su mejor actuación en el certamen italiano.
Toda la actividad del Roma Open puede seguirse por Disney+.
