El citado comité acordó la expulsión de Goijman por "faltas graves y repetidas al código de conducta de la FIVB y por violaciones de los acuerdos contractuales durante el campeonato del mundo masculino, disputado en octubre pasado en Argentina".

El dirigente argentino dispone ahora de 30 días para apelar la sanción ante el consejo de administración de la FIVB, que se reunirá del 31 de marzo al 2 de abril en Lausana (Suiza).

"Hemos actuado y continuaremos haciéndolo de acuerdo a los intereses del voleibol. Debemos velar, sin descanso, por nuestro código de conducta y por la ética, y responder a los infracciones con rapidez e intransigencia", declaró el chino Jizhong Wei, vicepresidente ejecutivo de la FIVB.

Wei presidió la reunión del comité ejecutivo, en ausencia, por enfermedad, del mexicano Rubén Acosta, máximo dirigente de la FIVB, que este mismo jueves recibió el alta médica tras permanecer hospitalizado durante seis días en la Clínica La Concepción de Madrid.

Asimismo, el comité ejecutivo ha reafirmado "su total apoyo" a Acosta y al suizo Jean Pierre Seppey, director general de la FIVB, según anunció este organismo en una nota de prensa.

El comité ejecutivo añade que "se enorgullece de la transparencia administrativa y financiera" que preside la conducta de la institución, "en total conformidad con las decisiones del Congreso mundial de la FIVB".

Goijman, reelegido miembro del consejo de administración de la FIVB en el Congreso Mundial que se celebró en Buenos Aires a finales de septiembre pasado, ya había sido suspendido, por las mismas acusaciones, de todas sus funciones nacionales, continentales e internacionales el 7 de noviembre de 2001.

Tras esta decisión, el presidente del voleibol argentino presentó ante los tribunales suizos una querella criminal contra Acosta y Seppey y otra civil en la que pidió la anulación de su suspensión. Estas denuncias dieron lugar a un registro policial de la sede de la FIVB en Lausana, el pasado día 4.