Ibáñez, de 30 años y de ascendecnai cubana, tuvo promedio al bate de .294 la temporada pasada y casi duplicó sus totales de carrera con 37 dobles, seis triples y 24 cuadrangulares, además de que remolcó 103 carreras, nueve menos que el total de sus primeras cuatro temporadas en Grandes Ligas.

Ibáñez, quien también cubrió la primera base cuando Mike Sweeney estuvo lesionado durante casi un mes, empató una marca del club con siete carreras impulsadas ante Anaheim el 14 de julio.

Al día siguiente, rompió una marca del club con 10 carreras impulsadas en dos partidos y finalizó con una marca del club de 13 carreras remolcadas en poco más de tres partidos.

Ibáñez había solicitado un incremento salarial de 800.000 dólares, para un salario por esta temporada de 3.4 millones de dólares. Sin embargo, el equipo le había ofrecido un contrato por 2.75 millones de dólares.

Ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo, su compañero en los jardines, el puertorriqueño Carlos Beltrán, tuvo una audiencia de arbitraje salarial el jueves en St. Petersburg, Florida, donde solicitó un aumento salarial de 3.5 millones de dólares, para terminar con un contrato que le pagaría por la temporada 6.95 millones de dólares.