Dos peleas del peso supermediano, una en Estados Unidos y la otra en Gran Bretaña, serán lo más atractivo del boxeo de primer nivel para la jornada de este sábado.
Esas batallas han conseguido mayor importancia aún, debido al creciente protagonismo que ha ganado la división luego que Saúl “Canelo” Alvarez se agenciara uno de los dos títulos AMB en la misma, el de campeón regular.
Si bien el mexicano en mayo volverá a pelear en la división mediana, en combate unificatorio contra Daniel Jacobs, y en caso de ganar se anuncia que en septiembre volvería a hacerlo en las 160 libras, está confirmado que de todas formas Alvarez mantendrá al mismo tiempo su cinturón de monarca supermediano por decisión de la AMB.
Que el tapatío se mantenga en esa categoría potencia su exposición y en consecuencia las dos batallas del fin de semana suman una expectativa adicional a la hora de especular sobre el futuro de sus vencedores.
En Minneapolis, Anthony Dirrell (32-1-1 con 24 KOs) y Avni Yildirim (21-1 con 12 KOs) se enfrentan por el cinturón vacante del CMB. Mientras tanto, en Greenwich, Londres, habrá otro emocionante duelo entre ingleses, cuando el dos veces campeón mundial James DeGale se enfrente a Chris Eubank, que fuera, a su vez, campeón mundial interino AMB, en batalla por el cetro internacional de la OMB.
El desafío de DeGale y Eubank promete mucha emoción, bajo una rivalidad de muchos años, pese a la cual no se habían logrado enfrentar y que en este caso tiene dos lecturas claras. DeGale es el gran favorito y deberá ratificarlo, mientras que para Eubank esta será quizás la última gran oportunidad de ganarse el respeto que reclama en el primer nivel e ir por ese título mundial verdadero que persigue hace tanto tiempo.
Ya el combate entre Dirrell y el turco Yildirim, tiene al estadounidense como el gran favorito. Dirrell va por recuperar un título que alguna vez fue suyo y que lo perdió en 2015 en una pelea cerrada contra Badou Jack. Esa es la única derrota en su palmarés.
En el caso de Avni Yildirim, también ha sufrido una solitaria derrota en su carrera y fue precisamente ante Chris Eubank que lo noqueó en el tercer asalto de una pelea celebrada en Stuttgart, Alemania en octubre de 2017. Desde entonces, ha ganado cinco peleas consecutivas, la última el pasado 15 de noviembre contra el dinamarqués de origen congoleño Lolenga Mock, ¡de 46 años!
EL EFECTO CANELO EN LOS SUPERMEDIANOS
Sin duda, la división vive un momento especial. La subida “express” de Canelo Alvarez de peso mediano al supermediano para enfrentar y vencer al campeón regular de la AMB, Rocky Fielding, en el pasado mes de diciembre, empieza a generar consecuencias directas con las 168 libras y también con las 160.
No sabemos aún si son malas o buenas noticias, pero indudablemente el mega contrato con la plataforma DAZN del mexicano (monarca AMB-CMB), con la cual tienen también contrato otros campeones como Daniel Jacobs (FIB) y Demetrius Andrade (OMB) empieza a tener efectos en la ruta de las principales figuras de estas dos divisiones.
Descartada ya la tercera pelea del tapatío contra Gennady Golovkin y sabiendo que sus peleas inmediatas serán contra hombres de la casa (Jacobs primero y Andrade después), cualquier otro púgil del primer nivel en esa división sabe que deberá colocarse en la fila para recibir alguna oportunidad a muy largo plazo o tal vez nunca llegar a las grandes bolsas. Por ello la “desbandada” es una posibilidad muy creíble en el futuro por llegar.
Billy Joe Saunders optó por subir a los supermedianos, como ya sabemos que también lo hará GGG y seguramente Jermall Charlo siga el mismo camino. Las posibilidades de cruces pasan indudablemente por el tema comercial (promotoras), pero también por las condiciones exigidas con el peso, en ese aspecto, es de esperar que luego de su pelea contra Canelo, también Jacobs se mueva a la división inmediata.
Durante el presente año, las Comisiones Atléticas en Estados Unidos tratarán de encontrar un consenso junto a los organismos para establecer oficialmente el límite de las 10 libras para el segundo pesaje, junto a otras posibles medidas en el mismo rumbo, lo que en los hechos obligará a que muchos pugilistas opten por emigrar a sus verdaderas categorías.
Daniel Jacobs es uno de ellos. Precisamente “Miracle Man”, con un tamaño más propio de un supermediano, es posible que se vea disminuido bajo la exigencia de no superar las 170 libras en la rehidratación inmediata al pesaje de su pelea contra Canelo en mayo. Según se sienta físicamente durante la pelea, el resultado de ese combate puede ser determinante para que abandone la división.
Golovkin en cualquier momento anunciaría su próximo rival y cada vez suena con más insistencia una pelea contra un supermediano, posiblemente en suelo europeo. Billy Joe Saunders decidió rechazar una pelea contra Demetrius Andrade por el cetro OMB de las 160 libras y sube a pelear por el cinturón vacante de la misma organización, pero en las 168, enfrentando el 13 de abril en Londres al alemán Sefat Isufi.
También en este último caso, las exigencias del peso han incidido, no obstante, la decisión de buscar un cinturón entre los supermedianos puede tener también el objetivo de salir de la zona de influencia de Canelo dada la imposibilidad de enfrentarlo, junto a la consabida necesidad de ir adecuando las carreras de los púgiles a la estrategia actual de las promotoras.
En ese aspecto, no hay duda en apuntar al contrato de Canelo con DAZN y su incursión por las 168 libras como un factor que marca los cambios y establece las agendas tanto en las 160 como en las 168 libras. Algo que, también es verdad, todavía es muy temprano para asegurar que sea un perjuicio o un beneficio.
No obstante, queda claro que la emigración de figuras hacia la división súper mediana mejora su exposición y peleas como las de este sábado cobran mayor protagonismo por esa misma razón.