Sean O’Malley se ha convertido en uno de los peleadores más populares de la actualidad en el UFC y alcanzó la etiqueta de “súper estrella” tras conquistar el título mundial de peso Gallo, pero en medio de la celebración, el estadounidense tiene un asterico con nombre y apellido que aún no se ha podido sacudir, Marlon “Chito” Vera.
O’Malley se convirtió en el nuevo monarca del peso Gallo tras vencer, con la afición del TD Garden entregada a él, al dar una sorpresa mayúscula tras derrotar a Aljamain Sterling, quien llegó a la cita en Boston como el amplio favorito en la línea de apuestas.
La victoria de O’Malley llegó llena de paralelismos con el ascenso a la cima del máximo referente de la historia de las artes marciales mixtas, Conor McGregor, quien también llenó esa misma arena antes de su primera pelea de campeonato.
De la misma forma que el irlandés, Sean O’Malley dependía de la precisión de sus manos para finalizar a los oponentes de manera contundente y en su momento, sorprendió a José Aldo con un cruzado (desde la guardia opuesta) para contragolpear. En 2020, una lesión en la pierna de O’Malley abrió la puerta para caer por nocaut técnico ante Vera.
Desde entonces, el estadounidense y el ecuatoriano han intercambiado palabras y retos.
“Chito” ha asegurado estar listo, mientras que Sean O’Malley ha expresado que esperaba el momento correcto para enfrentarse a su verdugo y ese momento parece haber llegado con el cinturón de por medio.
Lesiones y mala sangre
Las 135 libras han sido la división más competitiva de los últimos años, pero actualmente está plagada de peleadores lesionados en la clasificación.
El georgiano Merab Dvalishvili, quien carga con la mayor racha de victorias, no tiene fecha clara de su regreso por una lesión en la mano; Cory Sandhagen, quien viene de vencer a Vera y a Rob Font en peleas estelares, tendrá que ser intervenido por una dolencia en el tricep; Henry Cejudo se bajó de la cartelera en Boston por problemas en el hombro y Umar Nurmagomedov publicó en redes sociales que necesita cinco meses de rehabilitación.
Todos quieren entrar al octágono, pero nadie estaría disponible para el mes de diciembre, cuando el UFC regresa a Las Vegas, ciudad donde Sean O’Malley ha tenido la mayoría de sus peleas en la promoción y a la que quiere volver.