En parte, gracias a Ngannou, no parece haber un final a la vista para la moda de que los luchadores de MMA pasen al boxeo. Incluso si esto no tiene sentido para quienes pelean en el octágono.

Francis Ngannou soltó un gancho de izquierda en la distancia corta que chocó con la mandíbula de Tyson Fury. El impacto del golpe envió a Fury a la lona y podría haber cambiado la trayectoria de la economía de los deportes de combate en el futuro previsible.

Ngannou perdió el combate de boxeo ante Fury en octubre de 2023 por decisión, pero lo derribó en el tercer asalto y mostró buen boxeo, en general, contra el mejor Peso Pesado del mundo. Ngannou, quien dejó UFC como campeón de Peso Pesado a principios de 2023, estaba haciendo su debut en el boxeo profesional en esa pelea y muchos pensaron que debería haber ganado en las tarjetas.

La tendencia de los luchadores de MMA a perseguir grandes cantidades de dinero en el boxeo, impulsada al principio por Floyd Mayweather contra Conor McGregor en 2017 y con un rumbo real gracias a la inteligente confección de combates de Jake Paul, parecía estarse diluyendo... hasta que Ngannou estuvo cerca de noquear a Fury.

Ahora, la transición de las artes marciales mixtas al boxeo tiene nueva vida: un gerente le dijo a ESPN que uno de sus clientes actuales de UFC está buscando cancelar su contrato con miras al ring de boxeo y otro representante pronosticó que McGregor podría ser el próximo en dar el salto (otra vez). Aquellos en la industria, sin embargo, están divididos sobre si existen oportunidades legítimas y consistentes para que los luchadores de MMA tengan éxito en el boxeo o si es sólo una olla de oro que deslumbra tontos.

"Francis hizo eso y mantuvo la puerta abierta por más tiempo, y cuanto más tiempo esté abierta, más oportunidades podrían surgir, más posibilidades de que algo suceda", le dijo a ESPN un destacado gerente de MMA bajo condición de anonimato. "Creo que es algo de lo que se habla frecuentemente en los gimnasios y vestuarios, que los muchachos en MMA pueden competir en el boxeo más fácilmente que en el otro lado".

Ngannou participará en su segundo combate de boxeo profesional, el viernes, contra Anthony Joshua, un ex campeón unificado de Peso Pesado con un gran número de seguidores, en Arabia Saudita. Con esto vendrá otro día de un pago jugoso, en el lugar de las ocho cifras, una cantidad de dinero que incluso las estrellas más importantes de UFC (que no se llaman McGregor), no pueden ganar a menudo.

En la mayoría de los casos, los mejores boxeadores de carteleras estelares obtienen la mayor parte de los ingresos, mientras que UFC se lleva alrededor del 80 por ciento de los mismos, según documentos del caso antimonopolio en curso contra la promoción. Incluso, UFC tomó una parte del dinero obtenido del combate Mayweather vs. McGregor, porque McGregor tenía contrato con la organización y UFC esencialmente actuó como su promotor.

"Tenemos peleadores en nuestro elenco que quieren boxear, que en realidad están eligiendo no volver a firmar con UFC —rechazar el doble de dinero— porque quieren ver si hay una opción de boxear", dijo un gerente sobre varios de los mejores peleadores de UFC.

Un ex campeón de UFC dijo que la razón por la que esto sucede es "todo dinero", porque en el boxeo "si vendes 50,000 PPV, 100,000 PPV, aún así ganas un montón de dinero porque lo obtienes de cada primera compra". En otras palabras, si se elimina a UFC como intermediario, hay más fondos disponibles para los peleadores, incluso si el evento no se vende bien en comparación con las carteleras de UFC.

"Va a seguir sucediendo", dijo el ex campeón. "Si pensabas que era el final, creo que estamos apenas en el comienzo. Creo que más muchachos con nombres reconocidos, cuando terminen en UFC, seguirán este camino para probar suerte".

Los peleadores de MMA siguen de cerca el mundo del boxeo y lo que Ngannou hace en él, dijeron personajes de la industria. Pero aquellos que lo saben también advierten que la hierba no siempre es más verde del otro lado. "Reconocimiento del nombre" es una frase clave.

"Creo que la compensación de UFC es, para la mayoría de los peleadores, el nivel más alto que recibirán en cualquier otro lugar", dijo el destacado gerente. "Creo que la compensación de UFC ha ido en la dirección correcta".

McGregor y Ngannou han sido los únicos dos peleadores de UFC que actuaron en el boxeo fuera de la organización mientras aún estaban en su mejor momento. Otros, como Mike Perry, se han hecho un espacio lucrativo en Bare Knuckle FC. Pero algunos de los otros atletas, como los ex estelares de cartel de UFC, Nate Diaz, Anderson Silva, Tyron Woodley, Anthony Pettis y José Aldo, han subido al ring de boxeo al final de sus carreras en MMA. Jorge Masvidal le dijo a ESPN la semana pasada que también planea competir en el boxeo como próximo paso, luego de retirarse de UFC el año pasado.

"Aparte de Francis y Conor, no creo que nadie lo haya hecho de manera tan significativa", dijo otro gerente que ha representado a múltiples campeones de UFC.

Ngannou podría haber sido el único peleador de MMA que le dio un combate real a un boxeador de primer nivel. Pero ganar millones de dólares también tiene significado. Varios de los peleadores que pasaron al boxeo, incluido Díaz, ganaron más dinero en esas peleas que en cualquier pelea de UFC.

Un entrenador importante señaló que el entrenamiento de boxeo también es menos extenuante para el cuerpo (no hay que lidiar con lucha libre o agarre) y en la mayoría de los casos no tiene una reducción de peso tan pronunciada en comparación con las MMA.

"Pienso que tiene poder de permanencia debido al valor monetario que estos muchachos están obteniendo", dijo un importante entrenador de MMA. "Y creo que la gente debería darse cuenta de por qué los muchachos tienen una carrera prolongada en MMA y luego pueden pasar inmediatamente al boxeo y ganar tanto o posiblemente más en ese terreno. Pero también sufren menos lesiones. No tienen que reducir tanto peso y pueden tener un cambio rápido al boxeo. Aldo peleó (en el boxeo) y dijo: 'Podría pelear la próxima semana'".

En ese mismo momento, el entrenador dijo que pasarse al boxeo no funcionaría para todos. Los luchadores de MMA que no son grandes nombres no se convertirán de repente en estrellas de primer nivel y ganarán millones sólo porque se pongan guantes y zapatos más grandes. También hay un elemento de clase involucrado. Ngannou contaba con una oposición popular ya preparada que le resultaba atractiva de enfrentar. Un luchador de MMA que llegue al boxeo aún necesitaría una pareja de baile de renombre.

"Si no hay un plan claro de 'puedo conseguir esta pelea', ¿qué vas a hacer?", dijo el manager de algunos ex campeones. "¿Explotar tu camino hasta el final de un contrato? Y luego decir, 'ok, ahora soy agente libre y puedo boxear con el número 16 del CMB que nadie conoce y hacer lo mismo que estaba haciendo en MMA?'".

El destacado gerente dijo que el "punto óptimo" en este momento está en el rango de las 190 libras, porque un luchador popular de MMA podría pelear con alguien como Paul, KSI o Tommy Fury. Ese gerente dijo que es posible que McGregor, a quien le quedan dos peleas en UFC, pueda caer en esa categoría. McGregor adelantó recientemente un combate de boxeo con Manny Pacquiao.

"Él será el próximo", dijo el destacado entrenador sobre McGregor. "Y es por eso que preguntas: '¿esto se va a agotar?' No, porque peleará con Canelo Álvarez, peleará con Jake Paul. Algo viene con él que reabrirá esto".

La semana pasada, el campeón de Peso Gallo de UFC, Sean O'Malley, y Ryan García discutieron en las redes sociales sobre su deseo de pelear entre sí en el boxeo. En parte, gracias a Ngannou, no parece haber un final a la vista para la moda de que los luchadores de MMA pasen al boxeo. Incluso si esto no tiene sentido para todos los que pelean en el octágono.

"El boxeo no es ese jardín de rosas que la gente cree que es", dijo un veterano directivo de MMA. "No lo es. Si nos fijamos en la forma en que funciona el boxeo, la mayoría de los peleadores ganan mucho menos que en MMA".