A medida que se acerca el retorno al octágono de Conor McGregor, la idea de tener otro combate de boxeo de alto perfil, ya sea una revancha contra Floyd Mayweather o un pleito frente a Manny Pacquiao, es algo que él cree que se hará realidad.
"Me gustaría una revancha contra Floyd", aseguró McGregor en una amplia entrevista que se transmitió el lunes en el MMA Show de Ariel Helwani, en ESPN. "Creo que deberíamos tener otra pelea Floyd y yo. Puede elegir a alguien más, pero no será lo mismo", agregó.
Mayweather derrotó por nocaut a McGregor en el décimo asalto en un combate de boxeo escenificado el 26 de agosto de 2017. Dicho combate generó 4.3 millones de compras de pago por ver y más de $600 millones en ingresos generales, anunció Showtime. De hecho, ocupa el segundo lugar en dividendos detrás de la pelea de Mayweather con Pacquiao en 2015.
El presidente de UFC, Dana White, dijo recientemente que tiene un acuerdo verbal con Mayweather. White reveló que comenzará a hablar con el promotor de Mayweather, Al Haymon, para un posible pleito en otoño. No obstante, White no especificó si la pelea sería boxeo, MMA o una combinación de ambas.
"Fue una gran experiencia y, ya sabes, espero que se repita", matizó McGregor. "Va a suceder nuevamente", afirmó.
McGregor, que enfrentará el 18 de enero a Donald "Cowboy" Cerrone en el evento principal del UFC 246 en Las Vegas, dijo que ha habido conversaciones sobre una revancha con Mayweather, aunque no especificó qué tan serios han sido o con quién. Igualmente destacó que ha habido negociaciones con Pacquiao.
"Hubo una oferta de pelea con Pacquiao", indicó McGregor.
Asegura no se preparó bien ante Nurmagomedov
El sábado marcará la primera pelea de McGregor desde el 6 de octubre de 2018, cuando fue derrotado por el campeón peso ligero Khabib Nurmagomedov. McGregor ha criticado su preparación para esa pelea en el pasado, pero ofreció algunos detalles nuevos sobre su nivel de compromiso.
"Estaba bebiendo toda la semana de pelea ", expresó, asegurando que nunca lo había hecho en campamentos anteriores.
"Tenía gente escondida en un hotel, de esa parte del mundo (Khabib es oriundo de Daguestán). Yo llamaba y organizaba una pelea. Entonces venían del hotel y teníamos una pelea en toda regla, sin guardia. Teníamos una guerra, ganaba y noqueaba al tipo. Celebraba y luego volvía en tres días", señaló.
McGregor, dueño de una marca de whisky llamada Proper No. 12, dijo que no ha tomado una bebida en aproximadamente cuatro meses y describió este campamento como uno "perfecto".
"He cometido errores", confesó McGregor. "Y, sabes, he sido lo suficientemente hombre como para admitirlos y corregirlos esos errores. No soy perfecto", aseguró.
McGregor dijo que estima que ganará aproximadamente $80 millones el sábado ante Cerrone, récord en UFC. Aseguró, además, ganó alrededor de $50 millones para la pelea frente a Nurmagomedov.
McGregor también negó las acusaciones que surgieron cuando el The New York Times informó que enfrenta dos investigaciones de agresión sexual.
El Times informó en marzo que McGregor fue acusado de agredir sexualmente a una mujer en un hotel en el sur de Dublín. Fue arrestado y liberado después de ser interrogado en enero. Ese caso fue entregado a la fiscalía de Irlanda a principios de este año, según el Times.
El periódico informó en octubre que una mujer acusó a McGregor de agredirla sexualmente en un vehículo fuera de un pub de Dublín. McGregor no fue interrogado por la policía ni acusado en medio de la segunda acusación, según el Times.
Se le preguntó a McGregor si podía negar al 100% las acusaciones. "Sí, demonios ... vamos, ¿en serio?" reveló. "El tiempo revelará todo, el tiempo lo dirá todo", apuntó.