El peso wélter Mike Perry salió con el puño en alto del APEX de UFC acompañado únicamente por su esposa.
El peleador decidió presentarse sin entrenadores en su esquina para el combate en el UFC Fight Night: Poirier vs. Hooker y terminó venciendo por decisión unánime a Mickey Gall.
Luego que Gall pareció apuntarse el primer round, Perry reaccionó para llevarse los asaltos restantes tanto en la pelea de pie como en la lona, donde no tiene tantas credenciales.
En el segundo round estuvo cerca de noquear a Gall luego de conectarle un golpe a la cabeza que lo mandó a la lona, pero el tiempo se agotó y evitó la finalización. Tras los tres rounds, los jueces dieron tarjetas idénticas 29-28 a favor de Perry para decretar la decisión unánime.
Con su triunfo, Perry se coloca en 14-6 y pone fin a una racha de dos derrotas consecutivas, mientras Gall se estancó en 6-3.
"No estoy pidiendo más dinero, sólo estoy pidiéndole al gobierno que deje de tomar tanto", declaró Perry tras el combate.
Perry también aseguró que "buscaré un campamento, buscaré compañeros".