Calma, es lo que yo pediría para los aficionados de Giannis, el griego está en uno de los equipos más completos y las aguas van a regresan a su nivel.
Se ha jugado ya el 20% de la temporada regular y los campeones de la NBA no están por arriba de .500, pero eso es algo que debe tomarse con tranquilidad en las instalaciones de los Bucks, porque este equipo sólo puede mejorar a partir de que sus lesionados regresen y veamos algo más parecido a lo del verano pasado.
Básicamente todos los titulares han estado fuera al menos un partido a estas alturas de la campaña y Mike Budenholzer ha tenido que parchar cada noche su alineación, lo cual no debe ser subestimado para entender por qué sus promedios están por debajo de la media tanto en rating ofensivo como en defensivo.
A pesar de que tiene al jugador más dominante de la liga, ni si quiera Giannis Antetokounmpo es capaz de compensar tantas bajas importantes en un deporte que se juega cinco contra cinco, especialmente si pensamos que para ocupar su hábitat natural en la pintura, necesita que Brook López, Donte DiVincenzo y Khris Middleton le abran la cancha.
La bueno noticia para Antetokounmpo es que Middleton está de vuelta luego de haber dado positivo de COVID y su presencia se notó de inmediato con una aportación de doble dígito en la victoria sobre los Lakers de esta semana, lo que se sumará al eventual regreso de López, quién ya tiene en mente una fecha para reaparecer (aún no es pública) tan pronto como se libre de las molestias en la espalda.
De igual importancia será el regreso de DiVincenzo, el cual está más cerca ahora que ha practicado en cancha antes de los últimos partidos, recordando que el mejor francotirador que tienen los Bucks no ha jugado un sólo partido esta campaña por la operación en el tobillo a la que se sometió hace cinco meses.
A los 14 juegos fuera de López y a los 16 de DiVincenzo habrá que sumar los ocho en los que Middleton no estuvo, los seis de Holiday, los cinco de Bobby Portis y hasta el que Antetokounmpo se perdió (derrota contra Celtics) para terminar de dar el contexto de cómo hoy se encuentran fuera de la zona de playoffs en una Conferencia Este que tampoco podríamos llamar extremadamente competitiva al arranque.
Milwaukee ha tenido que usar rotaciones tan raras que incluyen al otro Antetokounmpo, Thanasis, de titular, o con minutos de estrella para Grayson Allen, quien dentro de las complicaciones está teniendo los mejores números de su carrera con 15.3 puntos por juego y un fenomenal 43 por ciento en triples, lo que lo convierte en un hallazgo que seguramente será muy útil en la segunda mitad de la campaña cuando las cosas se pongan más serias.
Calma, es lo que yo pediría para los aficionados de Giannis, el griego está en uno de los equipos más completos de la NBA y las aguas van a regresan a su nivel conforme avancen las semanas, me da la impresión de que lo más duro ya está pasando y que su quinteta titular, por la forma en la que se conocen, será temible en los playoffs.