Lejos de ser los "habituales" de la cilindrada, durante casi toda la jornada fue el local Garry McCoy (Yamaha YZR 500) quien hizo valer su conocimiento de esta pista para imponer su criterio frente al de sus rivales, con pilotos como el británico Jeremy McWilliams (Proton KR 3) o el holandés Jurgen Van de Goorberg (Honda NSR 500) dando la "nota" al ser de los más rápidos.

Lejos se quedó el italiano Max Biaggi (Yamaha M 1) de poder acceder a las primeras posiciones a pesar de ser el último vencedor, en Malasia hace una semana, de este periplo asiático que culmina en el bello paraje de Phillip Island.

Sin embargo, las peculiares características de la pista australiana han pasado factura a casi todos los primeros espadas, ya que salvo el ya campeón Valentino Rossi (Honda RC 211 V), que tuvo que emplearse a fondo para colocarse en cuarta posición, el resto se las vio y deseó para llegar cerca de los pilotos de cabeza y eso que nunca se rodó cerca del récord de la pista, que tiene desde el pasado año Biaggi con 1:31.9 y Barros estuvo en 1:33.0.

No es muy habitual encontrarse a Valentino Rossi en la quinta plaza, aunque lleve un par de grandes premios en los que por una razón u otra no consigue el óptimo rendimiento de su Honda RC 211 V, como tampoco lo es encontrar a Max Biaggi (Yamaha M 1) en la octava plaza, al ex campeón estadounidense Kenny Roberts (Movistar Suzuki GSV R) decimocuarto o a Carlos Checa, el otro piloto oficial de Yamaha, en la decimoséptima plaza.

Entre las novedades, estuvo el estreno del japonés Norick Abe con otra de las Yamaha M 1 de cuatro tiempos, que hace dos grandes premios recibieron el francés Olivier Jacque y el japonés Shinya Nakano, pero en el caso del primero la unidad de la que dispone es la única equipada con inyección electrónica como sistema de alimentación, en lugar de los carburadores que emplean el resto.

LA LUCHA EN 250cc.
El español Antonio Elías (Movistar Aprilia) fue el más rápido en la primera jornada de entrenamientos de la categoría, en la que el italiano Marco Melandri (Aprilia) y el español "Fonsi" González (Movistar Aprilia) se marcaron muy de cerca.

La jornada resultó muy movida y disputada, con constantes alternativas por parte de los principales pilotos de la cilindrada, si bien no fue hasta los minutos finales cuando éstos pasaron a la acción y comenzaron a rebajar con consistencia sus registros.

El español "Toni" Elías fue el más rápido, aunque se quedó a casi un segundo del récord de la pista, pero el verdadero interés de la cilindrada ya en la recta final de la temporada, está en la lucha por el título mundial que mantienen el italiano Marco Melandri y el español Alfonso "Fonsi" González Nieto, quienes se marcaron muy de cerca a lo largo de todo el día y, de hecho, al final sólo hubo entre ambos dos décimas de segundo de diferencia. Melandri fue quien en esta ocasión se mostró más acertado en el tramo final de los entrenamientos, pues hasta por tres veces y de forma consecutiva se acercó al registro de Elías, que se colocó en la "pole" provisional en su decimoquinto giro, pero no pudo batirlo y se quedó a escasamente 62 milésimas de segundo de su objetivo.

Mientras, "Fonsi" González Nieto, que había sido el más rápido por la mañana, si bien es cierto que lo fue a más de dos segundos del registro más rápido de la cilindrada, encontró más problemas de los previstos para "limar" las décimas de segundo que le alejaban de la cabeza de la clasificación.

No fue hasta su última vuelta cuando logró situarse cuarto en la formación de salida, junto a su compañero en el equipo Movistar Aprilia, Toni Elías, el italiano Melandri y su compatriota Franco Battaini (Aprilia).

El argentino Sebastián Porto, con Yamaha, volvió a estar metido en la discusión de los primeros puestos, y finalmente quedó ubicado sexto en los entrnamientos, pro delante de del italiano Roberto Rolfo.

Más temprano, en la categoría de 125cc., el francés Arnaud Vincent (Aprilia) estiró su mala racha en el circuito australiano, en el que sólo pudo ser vigésimo primero en los primeros entrenamientos dy tuvo que claudicar ante la eficacia de sus rivales por el título mundial.