Si bien en Coquimbo Unido quedaron felices tras la histórica clasificación a semifinales de la Copa Sudamericana, en el plantel del cuadro "pirata" también hubo molestia contra Junior de Barranquilla.
Rubén Farfán, delantero del conjunto nortino, aseguró que en el conjunto cafetalero fueron pocos educados por su masivo contagio de coronavirus, que les significó disputar la revancha con sólo 13 jugadores, es decir, sólo dos suplentes.
"Ellos querían manejar todo, la forma en la que hablaban. No te digo los garabatos que nos decían, y que por culpa del fútbol chileno ellos tenían los jugadores con coronavirus. Por poco nos querían agarrar a combos, pero nosotros siempre estuvimos firmes y les respondíamos que se dedicaran a jugar y si podían ganarnos que lo hicieran bien", reconoció Farfán en conversación con radio ADN.
Además, manifestó su molestia porque la ANFP no ha suspendido sus duelos en el Campeonato Nacional: "Cansado de tantos partidos que hemos tenido, estuvimos 14 días fuera de la ciudad, lejos de la familia, esto ha sido duro para nosotros. Nos están dando duro, pero nosotros no queremos llorar, vamos a jugar y no a reclamar que están siendo injustos con nosotros. Vamos a dar cara en los dos campeonatos. Tenemos un plantel corto y no hay tiempo para descansar. No vamos a llorar porque la ANFP no nos ha suspendido nuestros partidos cuando tenemos que jugar en la Sudamericana, no vamos en contra de nadie".
Sobre la histórica clasificación, dijo: "Nos costó mucho quedarnos dormidos por la alegría, pensar en el partido, que estamos haciendo historia con esta institución y representado bien al país. No fue un partido bueno de nosotros, el penal nos vino muy rápido, pero supimos sacar eso adelante. Es un sueño lo que estamos viviendo, hay jugadores que con 30-32 años recién están jugando una Copa Sudamericana, no lo han pasado bien en su carrera y mira dónde estamos. No pensábamos llegar a esta instancia, pero queremos llegar lo más lejos que se pueda. No queremos parar de soñar y representar bien al país".
"Tenemos que ir paso a paso. Las derrotas se celebran poco, y los triunfos también. Ya pensando en el partido del domingo contra O’Higgins, porque en la Sudamericana estamos bien, pero en el Torneo Nacional no. La tabla está apretada", concluyó.