Una fuente del Barcelona reconoció que la continuidad de Xavi no se cuestiona pese al bache que atraviesa el equipo.
BARCELONA -- La confianza del Barcelona en Xavi Hernández sigue siendo "total" y su continuidad en el banquillo del Barcelona no está cuestionada "en absoluto" pese al bache de juego y resultados que atraviesa el equipo, según una fuente del club informó a ESPN.
Del mismo modo, el entorno más cercano del entrenador considera que está “fuera de lugar” que alguien pueda poner en cuestión su continuidad recordando que, tras llegar al club en un momento de máxima dificultad, fue capaz de ganar hace apenas cinco meses el título de Liga con holgura, sentando las bases de un proyecto a largo plazo del que no puede dudarse por atravesar un mal momento de juego y resultados específico.
La derrota del martes en Hamburgo frente al Shakhtar Donetsk, que evitó la clasificación matemática del Barça para los octavos de final de la Champions, supuso un golpe moral "lógico" en todas las esferas de la entidad pero no motiva, hoy por hoy, dudas entre la directiva.
A pesar de que en círculos periodísticos el mal momento deportivo del equipo azulgrana haya provocado una crítica abierta por lo que se considera una caída evidente, la fuente del club consultada por ESPN traslada una imagen de unidad y confianza sin fisuras... Al menos de momento y a la espera de una reacción que se espera inmediata.
Cinco meses después de conquistar el título de Liga y cuando se cumplen dos años de su llegada al banquillo, Xavi vive sus horas más incómodas en el club. Las críticas hacia el juego del Barça que ya aparecieron tras la ajustada victoria en Anoeta frente a la Real Sociedad se multiplicaron a raíz de la debacle ante el Shakhtar.
El Barça, que es tercero en LaLiga, a cuatro puntos del Girona y dos por debajo del Real Madrid, recibe el domingo al Alavés con urgencia por mejorar el juego y los resultados. Además, tras el parón por selecciones enlazará en Montjuïc tres partidos de máxima exigencia ante Porto, Atlético de Madrid y Girona que marcarán de alguna forma las posibilidades del equipo tanto en LaLiga como en la Champions League esta temporada.
A Xavi se le recrimina tanto su falta de agilidad en cambiar el rumbo de los partidos como, más incluso, su poca contundencia en la sala de prensa, donde mantiene un discurso alejado de cualquier crítica hacia unos futbolistas cuyo rendimiento, en muchos casos, ha caído en picado.
Si se argumentaba en las lesiones las dificultades para imponer su teórica superioridad, a la que han regresado Robert Lewandowski o Raphinha, llamados a multiplicar la capacidad ofensiva y goleadora, el derrumbe se ha descubierto aún mayor. En los tres últimos partidos solo se han anotado dos goles y ninguno de ellos ha sido marcado por los delanteros. Primero Ilkay Gündogan encendió la esperanza en el Clásico y después fue Ronald Araújo quien evitó el sonrojo en San Sebastián... Pero en Hamburgo ya no hubo ni un solo remate entre palos más allá de Gavi.
EL TÉCNICO, FIRME
A Xavi, mientras, ni le ocupa una especulación respecto a su futuro. El técnico catalán verbalizó en Alemania la necesidad de "un reset" y, aunque admitió públicamente que su equipo "atraviesa un bache", ni se le ha pasado por la cabeza la posibilidad de renunciar.
Fuentes cercanas al entrenador consultadas por ESPN recuerdan las fases brillantes que ha mostrado el equipo en estos dos años bajo la dirección de Xavi y a la necesidad de "no entrar en el juego" de rumores "sin pies ni cabeza", dando por supuesto que en los despachos del Barcelona ni se ha discutido ni menos aún planteado el cambio de un entrenador que renovó su contrato hace poco más de un mes y cuya relación con Joan Laporta, se afirma, es de máxima confianza.