PSG abusó del débil Angers y solventó su visita al Stade Raymond-Kopa con una primera parte excelsa, marcada por las asistencias de Marco Asensio y por los dobletes de Bradley Barcola y Lee Kang-in que encarrilaron una plácida victoria (2-4) del líder de la Ligue 1.
El errático tránsito del equipo de Luis Enrique Martínez por la Liga de Campeones contrasta con la firmeza con la que camina por la Ligue 1. Si en la máxima competición continental ocupa la vigésimo quinta plaza de la Fase de Liga y está fuera de las eliminatorias, en el torneo de la regularidad de Francia se mantiene en la primera posición sin derrotas con nueve victorias y dos empates en once jornadas.
Su último tropiezo frente al Atlético de Madrid (1-2) esta semana, obligó a los hombres dirigidos por el técnico español a dar un golpe encima de la mesa para contentar a su siempre exigente afición. A priori, el rival era asequible. El Angers, inmerso en la pelea por no perder la categoría, se presentó como una víctima propicia para el París Saint-Germain, que no desaprovechó la ocasión para enderezar el rumbo.
Luis Enrique revolucionó su once en la búsqueda del cambio y lo encontró. Por lesión, obligado, se tuvo que quedar en la grada Willian Pacho. En su lugar entró en el centro de la defensa Milan Skriniar. Y el resto de novedades, hasta cuatro más, fueron puramente técnicas. Salieron del once Nuno Mendes, Vitinha, João Neves y Ousmané Dembélé y entraron Lucas Beraldo, Fabián Ruiz, Senny Mayulu y Lee Kang-in.
Las nuevas incorporaciones surtieron efecto y el París Saint-Germain mostró una versión más solvente y eficiente. Sin alardes, pero con mucha efectividad, controló en todo momento el partido con dos partes diferenciales: la primera, con mucho acierto, y la segunda más pausada y con el pie sin pisar a fondo el acelerador.
El primero en golpear fue Lee Kang-in, a quien bastaron tres minutos, entre el 17 y el 20, para dejar el partido prácticamente sentenciado. En el primer tanto, no desaprovechó un centro de Warren Zaire-Emery para abrir el marcador; y en el segundo, Asensio, liberado durante todo el acto inicial gracias a que Beraldo fijó a su marcador, dio su primera asistencia dirigida al coreano, que no la desaprovechó para celebrar el segundo del PSG.
Asensio aún tendría la oportunidad de sumar otro pase de gol, a la media hora y a Barcola, que estrenó su casillero con un disparo desde dentro del área. Y, al filo del descanso, el internacional galo remató la faena con el cuarto, un cabezazo inapelable que dejó el partido visto para sentencia con 45 minutos que se convirtieron en un mero trámite con dos únicos sobresaltos: Esteban Lepaul y Emmanuel Biumla, en el tiempo añadido, marcaron un par de goles que no afectaron en nada a un equipo intratable en la Ligue 1.