Lionel Messi no estaba teniendo mucho protagonismo en la final ante el Nashville SC, pero volvió a demostrar que no necesita tenerla todo el tiempo para ser decisivo.
Leo recibió fuera del área tras un intento de pase filtrado de Robert Taylor para Benjamin Cremaschi y la pelota le quedó en su zona favorita. Eludió a un rival y ante la salida del segundo remató con potencia para clavarla al ángulo derecho del arco rival y poner el 1-0.
Un gol que hizo incontables veces en su carrera y parece ser imparable, entrando desde derecha hacia el centro. Los rivales saben lo que hará, pero no lo pueden detener.
Este es el 10mo gol de Messi en su 7mo partido con la camiseta del Inter Miami y puede valer un título.