Fue una noche complicada en UFC Vegas 55 para los jueces en el Apex de Las Vegas. Luego de buenas finalizaciones en las preliminares como la de Sam Hughes, Chase Hooper, Uros Medic, Jailton Almeida y Joseph Holmes, la cartelera estelar tuvo tres decisiones divididas que podrían alterar las carreras de sus protagonistas.
En el combate estelar, Holly Holm parecía segura de llevarse la pelea ante Ketlen Vieira, pero dos jueces le dieron el triunfo a la brasileña, qué con razón, pide una oportunidad al título que disputarán Julianna Peña y Amanda Nunes.
El argentino Santiago Ponzinibbio tuvo un reto complicado, pero como siempre se entregó en una pelea que ganó en una de las tarjetas, aunque la victoria fue para el brasileño Michel Pereira, que está en racha de cinco victorias.
Eryk Anders pudo ser el más desfavorecido, pero tuvo una pelea dura en contra del coreano Junyong Park que terminó con decisión dividida en su contra; puede ser coincidencia o también un buen trabajo de los matchmakers, que presentaron peleas muy competitivas en UFC Vegas 55.
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Ketlen da un paso adelante
La brasileña venció, al menos en las tarjetas de los jueces, a Holm, que a sus 40 años mostró que sigue estando en nivel de campeonato en las 135 libras. Aunque incluso sus seguidores más apasionados deberían reconocer que el arranque lento en este combate le costó la victoria.
Al terminar el segundo round, cuando se salvó de una sumisión, su esquina hizo los primeros ajustes y la pelea cambio de sentido. Holm superó a Vieira en todos los terrenos de la pelea de pie, pero no fue suficiente para voltear las tarjetas.
Vieira, que venía de vencer a la ex monarca Miesha Tate, deberá subir ahora en el ranking, pero dependerá del criterio de los votantes si alcanza para superar a Raquel Pennington (que se recupera de una cirugía), Irene Aldana (que la noqueó en UFC 245) o a la propia Holm, que aparecía en el dos del ranking previo al combate.
Lo cierto es que el resultado la pondrá en la conversación para ser la siguiente retadora después del combate de UFC 277, donde la campeona Peña expondrá ante ‘La Leona’.
Si es paciente, el premio puede valer la pena. No cualquiera vence a dos ex campeonas de la categoría de forma consecutiva.
Tiempo de ajustes para Ponzinibbio
Nadie puede reprocharle la entrega al argentino, que hasta en la derrota se presta a grandes peleas. Pero está siendo víctima de su propia intención de mantenerse activo y pone en riesgo un legado brillante en el peso welter.
Cuando se anunció la pelea ante Pereira, todos los fans sabían que esa sería la pelea de la noche, sin importar el resto de la cartelera. Ninguno de los dos decepcionó.
La presión de Ponzinibbio le restó improvisación y espectacularidad al rival, que compensó con mucha movilidad. La ventaja en el alcance le bastaba para hacer mucho daño en el contragolpe o haciendo pagar a Santiago siempre que tenía que entrar con las combinaciones.
Eso no bajó el ritmo de ‘La Daga Argentina’ que encontró su distancia con la mano izquierda e hizo mucho daño con el gancho. Merecido bono para ambos, que no se guardaron nada. Ponzinibbio debe pensar muy bien su siguiente paso, pues no tiene nada que demostrar; desde su regreso ha enfrentado por igual rivales dentro y fuera del ranking y nunca escatima.
Una más para el ‘Dragón’
No le gusta hablar de más, y en ese bajo perfil hemos obviado a Jonathan Martínez en el peso gallo. Sin embargo, el peleador de origen mexicano y salvadoreño sigue dominando con su pateo y la complicada guardia zurda que presenta ante sus rivales. En poco más de tres años ya suma siete victorias en el octágono y se metió en racha de tres victorias con una gran exhibición técnica sobre el peligroso Vince Morales.
Las 135 libras son aguas profundas, pero ya se probó ante jóvenes en ascenso y veteranos. Es hora de ver a Martínez en contra de los mejores de la categoría.
Señor Chase Hooper
Puede que todavía tenga cara de niño, pero el prospecto de las 145 libras cerró muchas bocas este sábado. Tras perder dos de sus últimas tres peleas, las críticas se hicieron cotidianas para el que fuera el pelador más joven en el roster del UFC.
Las derrotas lo hicieron crecer y dio una muestra de ese crecimiento, sobre todo en el juego de pie, y los intercambios de posición con otro experto en jiu-jitsu como Felipe Colares fueron de alto nivel, hasta que finalmente logró terminar la pelea con el castigo de puños.
A los 22 años ya tiene 11 victorias como profesional y un bono de 50 mil dólares por la victoria.